Cañete reconoce que mantiene 185.104 euros en una petrolífera que suministra a barcos del Estrecho

El ministro de Medio Ambiente ha admitido en el Congreso que mantiene un paquete de acciones por valor de 185.104 euros en la Petrolífera Ducar S.L., una compañía que, según Arias Cañete, "no se dedica al bunkering (gasolineras flotantes que proporcionan combustible a otros barcos en alta mar) sino sólo al almacenaje de combustible.

La propia empresa, de la que Cañete fue presidente hasta ser nombrado ministro hace dos años, reconoce en cambio en su página web que "durante la mayor parte de su existencia, Ducar ha estado tanto en la logística como en la comercializacion del bunkering".

En una comparecencia tanto por iniciativa propia como a petición del Grupo Socialista ante la Comisión parlamentaria de Medio Ambiente, el ministro ha zanjado así las acusaciones vertidas por distintos sectores sobre sus supuestos intereses en empresas que suministran combustible a buques en el mar en la zona declarada de Especial Protección del Estrecho Oriental y que eluden de este modo el pago de determinados impuestos.

Arias Cañete ha insistido en que las 85.509 participaciones que tiene en Petrolífera Ducar representan sólo el 2,5% del total y no le da "ninguna capacidad de dirección". Ha señalado que su actividad consiste en "arrendar capacidad de almacenamiento" a dos compañías petroleras en Ceuta, "en tierra", donde tiene domicilio fiscal y donde desarrolla toda su actividad.

Arias Cañete: "No tengo ninguna vinculación con ninguna empresa que venda combustible en el estrecho de Gibraltar"Sanción a las flotantes

El ministro ha anunciado, además, que cambiará la ley de patrimonio natural y biodiversidad para poder sancionar a las gasolineras flotantes permanentes en Gibraltar y que mañana mismo presentará en Consejo de Ministros la propuesta de modificación por procedimiento de urgencia.

Según Arias Cañete, existe un "laguna legal" que hoy impide aplicar un régimen sancionador a determinadas prácticas de bunkering ya que la legislación vigente exige que se haya provocado un daño ambiental y no sólo un riesgo potencial. La idea es que el nuevo cambio normativo contemple el "riesgo ambiental" para poder castigarlo.

En su comparecencia ha explicado que el suministro de combustible a buques está regulado por las normas portuarias y se hace "con normalidad" en todo el mundo. Sin embargo, las gasolineras flotantes con tanques de gran tonelaje de carácter permanente es un sistema que no se emplea en otros puertos españoles, sólo en Gibraltar en una zona de gran valor ecológico. 

Hace escasas 24 horas, el Ministerio de Medio Ambiente denunció ante la Fiscalía la construcción de espigones ganando terreno al mar en un espacio natural protegido próximo a Gibraltar. Cañete ha asegurado que si no hay respuesta por parte de la Comisión Europea ante las denuncias de España por los "incumplimientos medioambientales en Gibraltar", queda el recurso del Tribunal de Justicia de la UE, "demandando a Reino Unido por no retirar o paralizar las actividades contaminantes".