El salón de actos de las Cortes de Castilla y León ha acogido este lunes 16 y martes 17 el congreso Desafíos constitucionales para el tiempo presente con cuatro bloques temáticos diferenciados y en él, bajo el título Las libertades secuestradas, se ha alimentado la campaña en contra del aborto.

Tal y como han confirmado las fuentes de Vox consultadas por este diario, el congreso ha estado organizado por la Universidad Católica de València, la Fundación Castilla y León (adscrita a las Cortes) y las propias Cortes, que han proporcionado el espacio para su desarrollo y los medios técnicos necesarios.

Polémicos políticos de Vox y PP entre los ponentes

Entre los ponentes anunciados en el programa del evento hay hasta tres miembros de la formación ultraderechista Vox: José María Llanos Pitarch, presidente del grupo parlamentario en la Comunitat Valenciana y portavoz adjunto del partido en las Cortes Valencianas, José María Sánchez García, diputado en el Congreso por Alacant, y Carlos Flores Juberías, actual candidato a la presidencia de la Generalitat Valenciana.

Sánchez García se hizo famoso en el ámbito político nacional el año pasado, cuando en el Congreso de los Diputados comparó a Pedro Sánchez con Hitler y al ministro Félix Bolaños con Goebbels​​. Flores Juberías, por su parte, fue condenado en 2002 por "violencia psíquica" contra su exmujer en un fallo que hoy se tipificaría como violencia machista. En los años 80 fue candidato del partido ultra Fuerza Nueva, liderado por Blas Piñar.

Otro de los ponentes es el popular Mariano Vivancos, que fue director general de la Agencia Valenciana de Evaluación y Prospectiva de la Conselleria de Educación hasta que le destituyeron por llamar "talibanes" a los profesores en uno de los actos organizados por el Ejecutivo valenciano para explicar los recortes que llevaba a cabo.

El encargado de clausurar el congreso fue Jaime Mayor Oreja, exministro de Interior del PP e impulsor de la plataforma Neo, marcadamente católica. En una reciente entrevista al diario Atlántico, aseguró que "con el aborto pasará como la esclavitud del siglo XVI, en 50 o 60 años se preguntarán cómo matabais a personas que iban a nacer en el seno de su madre". 

El acto ha resultado un auténtico fiasco debido a la escasa afluencia de público registrada y se ha podido confirmar gracias a la emisión en directo del mismo. Los encargados de inaugurarlo fueron Carlos Pollán, presidente de las Cortes, y Juan García-Gallardo, vicepresidente de la Junta, ambos de Vox.

"Las mujeres no son conscientes de las consecuencias"

Vicente Bellver Capella, encargado de abrir el bloque que versaba sobre aborto, eutanasia y gestación subrogada, es catedrático de Filosofía del Derecho en la Universidad de Valencia y miembro del Comité de Bioética de España, un organismo antiabortista y contrario a la reproducción asistida, la investigación con células madre, la eutanasia o la píldora del día después.

Bellver se mostró en contra de eliminar el consentimiento de la familia para interrumpir voluntariamente el embarazo: "Integrar a la familia es lo mínimo". "El contexto de opresión familiar es erróneo", añadió en el acto. Además, defendió que los tres días de reflexión antes de la interrupción del embarazo (que con la nueva ley se suprimirán) "son una garantía para proteger al nasciturus". También aseguró que "el asesoramiento previo al aborto no es una medida antiabortista, sino unos mínimos imprescindibles para resolver dos bienes constitucionales: la vida del nasciturus y la libertad de la madre".

En la tertulia posterior, protagonizada por Bellver, Pablo de Lora y Flores Juberías, este último aseguró que las mujeres "no son conscientes de lo que significa, ni de las consecuencias sobre la vida del nasciturus y la suya propia". Juberías añadió que las mujeres hablan del aborto "con palabras como me lo voy a hacer quitar, de manera tan neutral y aséptica como quien se quita una mancha de la mano o de la frente".

Al respecto, Juberías subrayó también que "olvidamos que cualquier norma jurídica normaliza ese comportamiento y multiplica su incidencia", en referencia a las supuestas consecuencias sociales del aborto. Bellver aseguró identificarse con el discurso que habla de "niño muerto", que "ahora resulta ofensivo, heteropatriarcal y machista", pero que se utilizaba en el pasado. Juberías quiso finalizar subrayando que "no se puede tener ningún derecho sobre una vida cuando ya puede vivir fuera del cuerpo de la mujer". Para cerrar, dijo: "Es dependiente de ti hasta un momento, pero no puedes acabar con esa vida".