La cadena Ritual Hoteles ha firmado este jueves, en Torremolinos, con la Asociación de Transexuales de Andalucía (ATA) el primer convenio por el que una empresa española se compromete a formar y contratar a personas transexuales. El objetivo del acuerdo es "dar visibilidad a este colectivo tan denostado toda la vida en el mercado laboral”, según ha afirmado Javier Merino, consejero delegado de Ritual Hoteles. 

No se ha concretado el número de plazas que ofrece la cadena hotelera. De momento, la asociación realizará cursos de formación para los puestos requeridos por el hotel tras los que habrá un proceso de selección en el que se le dará prioridad a las personas transexuales.

La cadena Ritual Hoteles tiene en Torremolinos el primer gran hotel enfocado al público LGTBI. En su plantilla cuenta con cuatro personas transexuales.

La cadena hotelera tiene unos 200 trabajadores (pudiendo llegar a doblar el número de trabajadores en temporada alta). Además del de Torremolinos tiene otros dos hoteles en Sevilla y en unos meses abrirá otro establecimiento de apartahoteles en la capital andaluza y otro hotelero en la localidad gaditana de Vejer de la Frontera.

Por su parte, Mar Cambrollé, presidenta de ATA, ha afirmado que “sin trabajo, no hay dignidad” y ha hecho un llamamiento para que las empresas “se liberen del prejuicio”. Además, ha pedido a la Junta de Andalucía que desarrolle la Ley Integral de Transexualidad, aprobada en 2014. “Las personas transexuales nos sentimos orgullosas de tener derechos que nos protegen contra los delitos de odio, pero también queremos y tenemos que comer”.

Francisco Javier López, coordinador de Políticas LGTB de la Junta de Andalucía, ha anunciado que la Junta de Andalucía está ultimando las medidas “para evitar la exclusión de las personas transexuales” del mercado laboral.

La asociación recuerda que en 2010, la Universidad de Málaga publicó los datos de una investigación sobre la situación psicosocial de la población transexual en España, en la que se reveló que el 70% de las personas transexuales tenían cerrada la puerta al mercado laboral, especialmente las menos jóvenes que han tenido históricamente la prostitución y el espectáculo como únicas salidas por culpa de este “apartheid laboral”, tal como define Mar Cambrollé, presidenta de la Asociación de Transexuales de Andalucía Silvia Rivera, la situación de exclusión del mundo del trabajo de este colectivo.