La familia del soldado republicano Andreu Flores, que falleció en la Guerra Civil en 1938, ha podido este domingo, 84 años más tarde, enterrar sus restos en el cementerio de Arenys de Munt (Barcelona), después de que fueran recuperados de la fosa común de Santa Magdalena, en Móra d'Ebre (Tarragona).

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y la consellera de Justicia, Lourdes Ciuró, han asistido a la entrega de los restos, "un acto de memoria y justicia histórica", ha escrito el presidente catalán en su perfil de Twitter.

Los restos de Andreu Flores "han podido ser devueltos con humanidad y respeto al pueblo donde vivió", ha señalado Aragonès, que ha destacado que la recuperación ha sido posible "gracias a la perseverancia de la familia y al firme compromiso del Govern de recuperar la memoria, abriendo fosas y rescatando a las víctimas de la guerra del anonimato".

Andreu Flores es el primer soldado republicano enterrado en la fosa común de Santa Magdalena, la más grande abierta por el momento en Catalunya, que ha podido ser identificado, gracias a que su hijo, antes de morir, dejó una muestra de ADN con la que se pudiera algún día cotejar los restos de su padre.

Entre diciembre de 2020 y julio de 2021, en la fosa de Santa Magdalena, junto a la que el ejército republicano había levantado un hospital de campaña donde atendía a los soldados heridos en la Batalla del Ebro, se han recuperado 177 cadáveres y nueve restos óseos en el marco del Plan de Fosas 2020-21 del Departamento de Justicia.

Al acto también ha asistido el director general de Memoria Democrática, Antoni Font. "Recuperemos los nombres, vida y memoria a los luchadores por la libertad", ha concluido su mensaje en redes el presidente catalán.