Mascarillas al aire libre en cualquier circunstancia y de manera obligatoria. Así lo explicita la Ley de medidas urgentes de prevención para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la covid-19 publicada este martes en el BOE, una norma que deriva directamente del decreto de nueva normalidad aprobado en el verano de 2020 y que restringe aún más la obligación de llevar cubrebocas al aire libre. La regla, que ha entrado en vigor este miércoles, ha reabierto polémicas, además de confundir a parte de la sociedad.

Hasta el momento, el plan de transición hacia la nueva normalidad obligaba a usar la mascarilla, pero permitía que los ciudadanos no la llevaran puesta al aire libre siempre que se pudiera respetar la distancia interpersonal de 1,5 metros. Esta era una medida de mínimos que fue modificada por la mayoría de las comunidades autónomas, obligando a utilizar la protección facial en todo momento, independientemente del lugar. La decisión –que no ha sido respaldada exclusivamente por el Gobierno, sino que cuenta con el respaldo del Congreso y del Senado– ha levantado ampollas y ha llevado a algunos ejecutivos autonómicos a mostrar su rechazo.

No en vano, el texto recogido del BOE es demasiado complejo como para resumirlo en dos párrafos. Estas son algunas de las claves de la norma.

¿Mascarilla obligatoria en todos los casos?

El texto contempla que todas las personas, a partir de los seis años, deberán utilizar la mascarilla en la vía pública en cualquier circunstancia. De esta forma, la norma ha borrado el apartado del decreto de nueva normalidad de junio que especificaba que se podría caminar sin ella siempre que hubiera posibilidad de respetar una distancia interpersonal de 1,5 metros. Una de las novedades más llamativas es que se cierra la puerta a algunas excepciones impulsadas por algunas comunidades autónomas, que permitían no utilizar cubrebocas en playas y piscinas.

Además, el documento recoge otras obligaciones que ya estaban funcionando como el uso de mascarilla en el interior de los medios de transporte, sea aéreo, marítimo o terrestre, de carácter público o privado. Si los pasajeros de un coche no son del mismo grupo de convivencia deberán circular, incluido el conductor, con la mascarilla puesta.

¿Se contemplan excepciones?

Además de los menores de seis años, el BOE estipula que las personas que presenten algún tipo de enfermedad o dificultad respiratoria que pueda agravarse con el uso de mascarilla, quedan exentos de esta obligación. Tampoco se deberá llevar durante la práctica de deportes individuales al aire libre (bicicleta, escalada, correr...). No obstante, este último punto dependerá también de la regulación existente en cada una de las comunidades autónomas. Asimismo, en el caso del transporte, se especifica que los pasajeros de buques y embarcaciones podrán quitarse la mascarilla cuando se encuentren en el interior de su camarote.

Comunidades y Gobierno, abiertos a volver a cambiar la norma

El anuncio de esta nueva norma no ha sido bien recibida por todas las comunidades autónomas, a pesar de que muchas de ellas ya habían legislado en 2020 para eliminar la excepción de los 1,5 metros de distancia interpersonal. El Gobierno es consciente de que la publicación de esta norma puede haber quedado obsoleta y se ha abierto a rebajar la norma que regula su uso para que no sea tan severa. Para ello, Sanidad ha pactado con los gobiernos autonómicos la creación de una mesa técnica para volver a cambiar la ley en la próxima semana.

Si las Comunidades ya habían legislado para su uso obligatorio, ¿por qué ahora se oponen a la norma?

La mayor parte de las comunidades autónomas legislaron en verano de 2020 para incrementar la obligación del uso de mascarilla, eliminando esa excepción que permite pasear sin ella al aire libre siempre que haya la suficiente distancia entre personas. La oposición a la nueva norma tiene que ver, precisamente, con las playas y las piscinas, puesto que algunos ejecutivos como el de Murcia, Baleares, Navarra o País Valencià explicitaron que no sería necesario utilizar cubrebocas en las playas y piscinas, para pasear, tomar el sol o bañarse.

¿Qué ocurre si alguien no se pone la mascarilla?

Las sanciones contempladas por el texto del BOE hablan de multas de hasta cien euros y se considera que incumplir la obligación del uso de mascarillas es una infracción leve.

¿Es realmente necesario incrementar la obligación de uso?

La decisión también ha levantado polémica entre expertos en salud pública, epidemiólogos y profesionales sanitarios que, desde el primer momento de la pandemia, han hecho hincapié en la necesidad de explicar con claridad las normas que se aplican y no dar bandazos. Pero además, hay quienes consideran que incrementar el uso de mascarillas en el exterior no es algo necesario en estos momentos de la pandemia. "Hace falta hablar de mascarillas en el exterior, pero para que empecemos a determinar cuándo vamos a dejar de usarlas, con qué criterios y dónde serán necesarias", argumenta el medico Javier Padilla y coautor de Epidemiocracia.