La Justicia francesa ha imputado al fundador de la plataforma de mensajería encriptada Telegram, Pavel Durov, por diversos cargos, entre los que destacan el blanqueo de crímenes y la complicidad en la difusión de imágenes de pornografía infantil. A pesar de la gravedad de las acusaciones, el empresario ha quedado en libertad bajo control judicial, una decisión que ha llamado la atención por las estrictas condiciones impuestas.

Durov, de 39 años, fue detenido el pasado sábado en el aeropuerto de Le Bourget, al norte de París, tras llegar en un avión privado. Su detención marcó el inicio de un proceso judicial en el que se le acusa de múltiples delitos, incluyendo complicidad en la administración de una plataforma en línea que permitió transacciones ilícitas en banda organizada, delito castigado con hasta diez años de prisión.

Entre las acusaciones más graves, destacan las de complicidad en la distribución de imágenes de pornografía infantil, narcotráfico y estafa en banda organizada. Además, Durov está bajo investigación por presuntos malos tratos a uno de sus hijos, una denuncia presentada por su expareja en Suiza en 2023.

La decisión de permitir que Durov quede en libertad bajo control judicial implica que debe cumplir con ciertas condiciones estrictas. El empresario ha tenido que depositar una fianza de cinco millones de euros y está obligado a presentarse dos veces por semana en la comisaría. Además, no podrá abandonar Francia mientras dure el proceso judicial.

El caso de Durov ha suscitado un intenso debate sobre la responsabilidad de las plataformas de mensajería en la moderación de contenidos delictivos. Telegram, que se ha presentado como una alternativa a las plataformas de mensajería estadounidenses por su enfoque en la privacidad, ha sido criticada por no actuar con suficiente rapidez contra la difusión de contenidos ilegales. Sin embargo, en un comunicado reciente, la empresa afirmó que "cumple con las leyes de la Unión Europea" y que es "absurdo afirmar que una plataforma o su propietario son responsables de los abusos cometidos en ella".

Moscú acusa a Francia de "pisotear la libertad de prensa"

"Francia ha violado la libertad de prensa con la detención del creador de Telegram", ha afirmado este miércoles la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova. Zajárova ha instado a los organismos internacionales a condenar la persecución judicial contra Dúrov.

"Todo esto demuestra una vez más la verdadera actitud del Gobierno de Francia, que pisoteó sin miramientos las normas internacionales sobre protección de la libertad de expresión y de manifestación de sus opiniones", ha asegurado la representante del Ministerio de Exteriores ruso. Zajárova ha criticado a París al señalar que "si defiende determinadas normas, no solo debe ser fiel a estas, sino también velar por ellas y cumplirlas".

"Mientras decenas de millones de usuarios de las redes sociales expresan su indignación al respecto y los representantes de la comunidad financiera están en estado de shock, las élites neoliberales guardan un silencio sepulcral", ha denunciado. 

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha advertido que, de no ser así, se trataría de "un intento directo de restringir la libertad de comunicación e incluso podría considerarse una intimidación directa contra el líder de una importante empresa", lo que revelaría el trasfondo político de este caso.