"Decepcionante y sorprendente". Con esas palabras ha reaccionado el Ministerio del Interior al documental de la cadena británica BBC sobre la tragedia del pasado 24 de junio en la valla de Melilla, en el que se reafirman informaciones publicadas por medios españoles, entre ellos Público, que responsabilizan también a las autoridades españolas y no solo a las marroquíes de las decenas de muertes de migrantes en aquel fatídico intento de salto entre Nador y la ciudad autónoma.

El departamento de Fernando Grande-Marlaska, que vio "oportuno y proporcionado" aquel operativo policial, critica las "graves acusaciones" de la televisión pública británica "sin el sustento de ninguna prueba". La BBC asegura que varias de las muertes tuvieron lugar en suelo español y que agentes marroquíes se llevaron los cadáveres, algo que Interior niega tajantemente.

Sin embargo, Interior aún no ha entregado al Defensor del Pueblo la información adicional que este le solicitó para continuar la investigación que aún mantiene abierta sobre los hechos.

El pasado 14 de Octubre, el equipo de Ángel Gabilondo hizo público su informe preliminar sobre el asunto, y en él ya señalaba varias presuntas ilegalidades cometidas por las fuerzas de seguridad españolas, aunque no hizo referencia a los fallecimientos ni a las circunstancias, aunque advertía de que aún quedaban aspectos por esclarecer que requerían más tiempo y material. 

En sus requerimientos, el Defensor del Pueblo pedía a la Secretaría de Estado de Seguridad "más imágenes del 24 de junio del perímetro fronterizo que podrían ayudar a aclarar algunos extremos". Unas imágenes que deberían haber registrado las diferentes cámaras de circuito cerrado del punto exacto donde todo ocurrió.

Se trata del antiguo paso fronterizo de Barrio Chino, en desuso desde 2020, que cuenta con cámaras de vigilancia que con gran probabilidad recogieron imágenes de la avalancha, la violencia policial y, sobre todo, la jurisdicción en la que murieron decenas de personas. Si la versión de Interior es cierta, esas imágenes probarían que ninguna de las muertes se produjo en territorio de jurisdicción española. Sin embargo, la oficina del Defensor del Pueblo aún no las ha recibido.

"Vieron y no impidieron"

El documental británico no solo pone en entredicho la versión de Interior de que los hechos sucedieron solo de manera "tangencial" en Melilla, también afirma que las fuerzas de seguridad españolas "vieron y no impidieron que decenas de migrantes murieran en su frontera con Marruecos".

De hecho, la BBC va más allá al asegurar que los agentes marroquíes llegaron a mover varios cadáveres que estaban situados en territorio español, es decir, que murieron en la zona de la frontera controlada por la Guardia Civil, al menos cuando el paso fronterizo de Barrio Chino ha estado en funcionamiento. La televisión asegura que ha visto y verificado vídeos que no publica por contener imágenes dantescas del estado de los cuerpos.

Sin embargo, Marlaska siempre ha situado los hechos o en la ciudad marroquí de Nador o en "tierra de nadie", tanto en declaraciones a prensa como en sede parlamentaria. "Absolutamente nadie, ni la Guardia Civil, ni la Gendarmería, ni la Fiscalía General del Estado, ni El Defensor del Pueblo, ni las autoridades marroquíes sostienen que las muertes tuvieron lugar en territorio nacional", insiste Interior, que acusa la BBC de carecer de pruebas.

Su reacción fue similar cuando Público reveló en exclusiva que varios gendarmes marroquíes cruzaron a territorios español para detener y devolver en caliente a varios de migrantes que lograron superar el vallado, a pesar de la contundencia de unas imágenes que también ha verificado en esta ocasión la BBC.

El ministro primero lo negó cuando fue interrogado en el Congreso por el diputado de Eh Bildu Jon Iñarritu, a quien afeó hacer afirmaciones sin pruebas. El pasado septiembre, en cambió, Marlaska cambió su versión y se refirió a esta circunstancia como algo normal. "A veces entran [en España] pero no actúan", dijo.

Ahora, el ministro vuelve a acusar a un medio de comunicación de carecer de pruebas, aunque no son pocas las voces políticas que han pedido a Interior que haga públicas las imágenes de aquel día que, se supone, deberían respaldar su versión de los hechos.

No está claro si la Fiscalía General del Estado, que también tiene abierta una investigación sobre los hechos, ha solicitado o recibido las imágenes que ha solicitado a Interior el Defensor del Pueblo. El contenido de la investigación aún es reservado, apuntan fuentes del Ministerio Público a menos de dos meses para concluir el primer plazo de medio año para investigar. En este punto, la Fiscalía todavía tiene "pendientes de realizar algunas diligencias", aunque no precisa qué actuaciones ha realizado hasta ahora.

Visita a Melilla de varios diputados

El próximo lunes, varios diputados portavoces de la comisión de Interior del Congreso viajarán a Melilla para visitar el paso fronterizo y la comandancia de la Guardia Civil. Fuentes de la comitiva explican a Público que el objetivo es ver el lugar de la tragedia y tratar de visionar imágenes, así como pedir explicaciones y detalles sobre ese día.

Sin embargo, según el reglamento, "los diputados están obligados a adecuar su conducta al reglamento y a respetar el orden, la cortesía y la disciplina parlamentarias, así como a no divulgar las actuaciones que, según lo dispuesto en aquél, puedan tener excepcionalmente el carácter de secretas".

"Lo más importante es que parte de los hechos y de las muertes muertes ocurrieron en territorio español. Aunque el Gobierno lo niega es una evidencia. Por eso debe facilitar las imágenes al Defensor del Pueblo y también ponerlas a disposición de ciudadanía, como hizo el PP después de las muertes de El Tarajal en Ceuta", reclama Iñarritu, uno de los diputados que visitará la valla de Melilla.

El documental de la BBC también ha agitado los ánimos entre otros socios del Gobierno, como Unidas Podemos. Jaume Asens, diputado de la coalición y portavoz de En Comú Podem, ha pedido a Interior que rectifique su versión y ha lamentado que las muertes podían haberse evitado si la Guardia Civil hubiera reaccionado adecuadamente.

Los socios del Gobierno han adelantado que pedirán una nueva investigación parlamentaria sobre los hechos después de que el PSOE bloquease la última petición.