La Guardia Civil detiene a cuatro individuos que robaron y agredieron a dos ancianos

Los gritos revelan la extrema violencia del robo. La víctima se lamenta y niega tener más dinero, pero el delincuente insiste y amenaza con represalias. Porque en la planta baja de la vivienda tienen maniatado al hermano de la mujer que aparece en la cámara de seguridad de la vivienda. Ella tiene 84 años. El, 87.

Le hacen cortes profundos en la cabeza, y a consecuencia de los golpes recibidos sufrirá varios coágulos de los que tendrá que ser intervenido.

Poco después de un mes de los hechos la guardia civil detiene a los presuntos autores del robo. Son cuatro. Dos accedieron a la vivienda y otros dos se quedó fuera, vigilando.

Se llevaron joyas y unos 30.000 euros y estaban preparando otro golpe de similares características, según nos cuenta Artura Marcos, jefe de Policía Judicial e Información de la Guardia Civil en la zona de Cantabria.

Para el robo perpetrado en Oriñón habían estudiado las costumbres y hábitos de sus víctimas, y se aprovecharon de su vulnerabilidad y de las características de la localidad, lugar solitario y apenas habitado en la fecha en que se produjeron los hechos