Las altas temperaturas provocadas por la ola de calor que ha sofocado a España durante la última semana ha dejado un escenario negro en las sierras y montes del país. La ceniza inunda el paisaje de los bosques que han sido aniquilados por unas llamas que parecen cada vez más controladas. 

Los equipos de bomberos de Castilla y León, Euskadi, Castilla-La Mancha, el País Valencià y Catalunya han dado por estabilizados o, en su caso, extinguidos todos los focos. No ha ocurrido lo mismo en Navarra y Aragón, donde las labores de extinción continúan sin descanso.

La mejor noticia llegó este lunes, cuando las autoridades castellano-leonesas informaron de que el perímetro del incendio forestal, declarado el pasado miércoles en la reserva de la Sierra de la Culebra, en Zamora, había quedado estabilizado. En total, ha quemado más de 30.000 hectáreas, la mitad de ellas arboladas, lo que le convierte en el fuego más virulento en la última década.

Los bomberos, actores protagonistas en estos días de alta intensidad, han denunciado junto a los sindicatos forestales la precariedad y la falta de formación profesional de los efectivos. Ponen el foco en las políticas forestales que han imperado en la región gobernada por Alfonso Fernández Mañueco, quien asegura que "mantener el operativo de incendios todo el año es absurdo y un despilfarro".

Avanza la extinción de los fuegos en Navarra

En Navarra las llamas continúan arrasando, pero las labores de los bomberos progresan favorablemente. Tras un fin de semana sin respiro, que ha llegado a sumar hasta seis focos graves, el vicepresidente primero del Gobierno Foral, Javier Remírez, actualmente solo considera preocupante el referente a Gallipienzo.

Este lunes al mediodía, se detectó un nuevo incendio entre el embalse de Yesa y el Monasterio de Leire por el que ha sido detenida una persona acusada de provocarlo. Este fuego obligó incluso a cortar el tráfico en la Autovía del Pirineo (A-21) entre las 17.00 y las 21.30 horas en ambos sentidos. El denso humo se podía apreciar a varios kilómetros de distancia, pero ya está estabilizado.

Por su parte, el incendio de la zona de Obanos y Puente la Reina, así como el frente que había alcanzado la Sierra de El Perdón, han sido controlados gracias a las continuas descargas de agua realizadas durante todo el día por los medios aéreos y el trabajo de la UME.

Según datos del Gobierno de Navarra, desde que comenzó la ola de incendios, casi un millar de personas han tenido que abandonar sus hogares huyendo del humo y las llamas. Se mantienen los desalojos en las poblaciones navarras de Gallipienzo Nuevo y Gallipienzo Viejo, Lerga, Olleta, Eslava, Makirriain, Sansoain y Amatriain, a la espera de que se apruebe el retorno a algunas de ellas tras los vuelos de reconocimiento.

Llegados a este punto, la presidenta María Chivite ha trasladado al presidente Pedro Sánchez la necesidad de declarar todas las áreas afectadas por los gravísimos incendios que ha sufrido Navarra como zona catastrófica.

Nuevo incendio en Catalunya y controlados los anteriores

Un nuevo incendio se ha declarado en la tarde del martes en la comarca del Garraf (Barcelona), donde las llamas han afectado ya a casi 20 hectáreas. Por otro lado, los bomberos han dado por estabilizado el incendio de Artesa de Segre (Lleida), que desde el pasado miércoles ha afectado a más de 2.700 hectáreas, y el de Peramola (Lleida).

Protección Civil ha rebajado el nivel de emergencia al nivel de alerta el plan Infocat, según ha anunciado el conseller catalán de Interior, Joan Ignasi Elena. Por su parte, el juzgado de guardia de Solsona decretó el lunes prisión provisional para el hombre de 25 años que presuntamente provocó cinco de los incendios forestales en Lleida, según ha informado Europa Press.

Desde el 15 de junio, en la comunidad catalana se han registrado 240 incendios forestales y de vegetación. En concreto, según datos de los bomberos, el miércoles hubo 56 incendios, el jueves 44, el viernes 50, el sábado 47, el domingo 36, seis el lunes y el del Garraf este martes.

Dos incendios preocupan en Teruel

En Aragón todavía no está estabilizado el incendio de Castejón de Tornos (Teruel) que el lunes obligó a evacuar a 80 ancianos de una residencia de Burbáguena. Según el director general de Gestión Forestal de Aragón, Diego Bayona, el fuego lleva calcinadas unas 1.000 hectáreas.

Las llamas también obligaron este lunes a cortar la N-232 entre Báguena y Burbáguena. El incendio de Sigüés, por otro lado, está en fase de estabilización tras haber quemado 60 hectáreas. 

Navarra rebaja el nivel de alerta 

El consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, ha anunciado este martes por la tarde que se ha decidido reducir el nivel de alerta por los incendios forestales al nivel de preemergencia ante la evolución positiva en la lucha contra los fuegos que se han venido declarando desde el pasado sábado. 

Remírez ha explicado, en declaraciones a los medios de comunicación, que los datos son "positivos" y ha explicado que "ahora mismo preocupa el frente este de Navarra -zona de San Martín de Unx y Gallipienzo-", donde la evolución es positiva, pero se van a seguir centrando en este lugar los "esfuerzos" durante la noche. 

"Estamos ante una buena noticia en el sentido de que se confirma la evolución positiva de este episodio de crisis", ha manifestado Remírez, que ha subrayado que las únicas localidades que en estos momentos permanecen evacuadas son Olleta, Amatriain, Sansoain y Maquírriain, que suman en torno a unos 85-90 habitantes.