Las autoridades griegas han detenido a 13 tripulantes de un yate bajo la presunción de que provocaron un incendio en la isla de Hidra tras lanzar fuegos artificiales desde el barco, en un incidente que ocurre mientras los bomberos del país intentan controlar decenas de focos abiertos durante los últimos días.

Los rescoldos de los fuegos artificiales acabaron incendiando el único pinar de la isla. Los sospechosos intentaron apagar el fuego ellos mismos pero acabaron llamando a los bomberos antes de abandonar la zona. Las llamas llegaron a arrasar hasta 120 hectáreas.

Navegantes de barcos próximos acabaron informando de lo ocurrido a las autoridades, en medio de la indignación del ministro de Protección Civil griego, Vasilis Kikilia. "Acabamos echando mano de seis vehículos aéreos y dos grupos de bomberos para lidiar con el fuego; fuerzas que hacían falta en otros frentes", lamentó en declaraciones a la televisión griega OPEN TV.

También el alcalde de Hidra, Giorgios Koukoudakis, ha protestado ante esta "irresponsabilidad" de "tirar fuegos artificiales contra un pinar". "Estamos en el apogeo de la temporada turística y sería recomendable que todo el mundo fuera consciente de lo que hace", ha lamentado.

Y es que Grecia lleva días luchando contra decenas de incendios que se han declarado por casi todo el territorio heleno. Los fuegos más fuertes se encuentran en el sur del país y las temperaturas son favorables con la entrada del verano.

Ahora, la tripulación del barco Perséfone comparecerá ante un tribunal del Pireo y podrían ser condenados a penas de entre 10 y 20 años de cárcel si son hallados culpables de provocar el incendio. El yate, que había sido alquilado por 17 kazajos para una fiesta particular, ha sido confiscado.