La DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que desde hace días ha azotado el litoral mediterráneo e Illes Balears ha dejado a su paso fuertes tormentas y vientos, hasta el punto que esta última comunidad permanece en alerta amarilla. En total, en las islas se han registrado 416 incidencias relacionadas con las lluvias y tormentas durante el miércoles y el jueves, la mayoría de ellas en Mallorca, donde se han gestionado 225 accidentes vinculados al temporal.

Mientras que en la mayor parte de áreas del archipiélago balear se han registrado en torno a 100 litros de agua por metro cuadrado, en algunos pueblos como Es Mercadal (Menorca), se han llegado a acumular más de 200 en un solo día. En esta localidad han tenido que llevarse a cabo, debido a la magnitud del temporal, numerosas labores de rescate de vecinos y en la isla se han tenido que cancelar los vuelos que estaban previstos para el jueves dada la peligrosidad del tránsito aéreo en las islas. 

Además, a causa de los estragos causados por las incesantes tormentas en Menorca, el Consell insular de este territorio ha anunciado este viernes que elaborará un inventario de daños del temporal para solicitar al Consejo de Ministros la declaración de zona catastrófica. Ante la gravedad de los efectos de la DANA en la isla, la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, se ha desplazado a Es Mercadal para valorar la situación y ha agradecido a los equipos de emergencia las labores de rescate realizadas, así como "la prudencia de los vecinos".

"Ahora toca una parte que es delicada, compleja, que hay que hacer bien", ha manifestado la ministra en relación la recuperación del torrente y el litoral, así como las infraestructuras y casas.

Este fenómeno meteorológico se origina a través de una corriente de intensa corriente de vientos en niveles altos de la troposfera que circula de oeste a este, separando el aire polar frío del aire tropical cálido. Una vez se separa de la corriente una zona con aire frío rodeada de aire más cálido (lo que se conoce como "corriente de chorro") se forma lo que denominamos comúnmente DANA.

Los expertos de eltiempo.es definen el fenómeno como "un sistema de baja presión o depresión en los niveles altos de la atmósfera, que se ha separado totalmente de la circulación general de la atmósfera y que aparece en el hemisferio norte". Por tanto, las DANA no se forman por todo el planeta, sino únicamente en algunas zonas circunscritas al norte global.

El contacto de las masas de aire frío con el aire cálido y cargado de humedad del Mediterráneo al final del verano, como es el caso que se ha dado en esta última DANA, crea una gran diferencia térmica acusada en las diferentes capas de la atmósfera, aumentando así la inestabilidad de la misma, que facilita el ascenso de las masas de aire. De este modo, es muy frecuente que se den precipitaciones e inundaciones, pero también elevadas temperaturas y tiempo cambiante en numerosas áreas afectadas por el fenómeno. 

Normalmente, el periodo de duración de la DANA suele ser de un par de días o tres días. Al morir, las corrientes se dividen y al debilitarse son absorbidas por otro sistema más potente. 

Además, tal y como señala la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), cuando la DANA se manifiesta o refleja marcadamente en todos los niveles se produce la llamada borrasca fría aislada. Eso sí, desde este organismo alertan de que es habitual denominar erróneamente a este fenómeno "gota fría", a pesar de que existen diferencias semánticas entre ambos términos. 

Mientras que DANA es un término de carácter técnico que describe la situación meteorológica específica de una depresión aislada en niveles altos, la gota fría remite concretamente a los efectos de esta depresión cuando interactúa con las capas inferiores de la atmósfera. Ello provoca precipitaciones intensas y otros fenómenos meteorológicos extremos.

Por ende, a ojos de la Aemet, "el concepto de gota fría resulta poco preciso e incompleto, por lo que debe ser sustituido por otro más moderno y efectivo que explique la formación y evolución de estas perturbaciones de altura de forma simple y que se ajusten a la realidad observacional", recomiendan desde la Aemet.

A pesar del intenso temporal que se ha vivido en las últimas jornadas, los expertos envían un mensaje tranquilizador en relación a las previsiones de los próximos días. A lo largo de este viernes, las lluvias irán disminuyendo paulatinamente, de manera que el fin de semana ya habrán remitido por completo los efectos de la DANA. Además, los servicios de emergencias de Balears han anunciado que la mayoría de las incidencias están resueltas (aunque todavía quedan 19 incidentes activos). Eso sí, ésta no desaparecerá sino que se desplazará hacia el Mediterráneo central hasta llegar a Italia.