Tres inmigrantes varones murieron a bordo y otro falleció en la playa tras llegar este martes al sur de la isla atlántica española de Tenerife en una embarcación precaria, en la que viajaban junto a 43 personas más de origen subsahariano, informaron los servicios de emergencias de la región insular de Canarias.

El fallecido en la playa del Cabezo, en la población de El Médano, murió a causa de una parada cardiorrespiratoria mientras los equipos médicos trataban de reanimarlo. Entre los supervivientes hay una mujer y 17 posibles menores de edad.

Las asistencias médicas trasladaron a tres de los ocupantes del cayuco a un centro sanitario por sufrir deshidratación, quemaduras causadas por el agua del mar y el combustible del motor, además de erosiones, sin que ninguno de ellos esté grave.

Los servicios de emergencia recibieron la primera llamada de aviso de la llegada de esta embarcación por medio de personas que pernoctaban en esa zona de la costa y que habían oído los gritos de auxilio de los inmigrantes.

Los cuatro fallecidos son las primeras víctimas de las que se tiene constancia este 2021 en la conocida como "ruta migratoria canaria o atlántica", que el año pasado se cobró la vida de casi 600 personas, según datos estimativos de la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU.

Sin embargo, la ONG Caminando Fronteras eleva los muertos y desaparecidos que trataron de llegar a las islas Canarias a 1.851 personas.

En 2020 llegaron irregularmente a España 41.861 inmigrantes por vía marítima y terrestre, un 29% más que el año anterior debido fundamentalmente a la fuerte presión migratoria sobre las Canarias, a cuyas costas arribaron 23.023 personas, un 756,8% más que en 2019.

Más de la mitad de estas personas arribaron a las costas canarias (23.023, frente a las 2.687 registradas en 2019), donde se contabilizó la llegada de 745 embarcaciones, un 477% más que un año antes (129).

Es el año de más llegadas irregulares a esas islas españolas desde 2006, cuando fueron cerca de 32.000.

También hoy llegó al litoral de la isla de Lanzarote una patera con 22 inmigrantes de origen magrebí en buen estado: 21 varones, uno de ellos posiblemente menor, y una mujer, que aseguraron haber salido de Agadir (Marruecos) hace cuatro días, informó la Cruz Roja.

La ruta "mortal" hacia Canarias 

Por rutas migratorias, la que tiene Canarias como destino es la más mortífera de todas, con 1.851 víctimas, el 85% del total, con 45 naufragios de embarcaciones salidas desde países como Marruecos, Senegal, Gambia o Mauritania. Son "trayectos son excesivamente largos", por lo que se contabilizan un gran número de embarcaciones desaparecidas en pleno océano. La ruta canaria presenta una tasa de mortalidad del 32,1%, explica. Es decir, que "tres de cada diez personas que cruza la ruta atlántica muere".

La ruta desde Argelia —con destino Beleares, Murcia y Cartagena— también ha aumentado su flujo considerablemente este año, como ya alertó Público. Y con el alza de salidas, también ha crecido el número de tragedias, con 23 naufragios que se han llevado 231 vidas.

Las razones de este éxodo, apunta Caminando Fronteras, hay que buscarlas también en la crisis generada por la pandemia, que ha empobrecido aún más a la sociedad argelina. Pero también en la represión gubernamental al movimiento pro democracia Hirak, que ha desembocado en una persecución
política contra la juventud, aseguran. La ruta también es larga y peligrosa, aunque con embarcaciones algo más resistentes. Sin embargo, los migrantes pocas veces alertan cuando están en peligro por "miedo a ser repatriados a los países de origen", puntualizan.