Público
Público

Los agricultores desperdician los plátanos de Canarias para que su precio no baje

Los productores creen que si los precios cayeran demasiado, los costes de transporte de la mercancía podrían superar las ganancias de la venta, comprometiendo así la rentabilidad.

Un agricultor del plátano recoge plataneras en una finca de Fuencaliente, en La Palma, Santa Cruz de Tenerife, Canarias (España).
Un agricultor del plátano recoge plataneras en una finca de Fuencaliente, en La Palma, Santa Cruz de Tenerife, Canarias (España). Imagen de archivo. Kike Rincón / Europa press

Actualmente, el precio del plátano de Canarias ronda los 2,5 euros por kilo, mientras que la banana apenas alcanza 1,5 euros. Para preservar esta diferencia de precios, los agricultores de plátanos de Canarias están reduciendo parte de su producción en el mercado. Esta estrategia busca evitar una caída de precios causada por un exceso de oferta.

Este fenómeno, conocido como la pica del plátano, tiene sentido para los productores, ya que consideran que, si los precios cayeran demasiado, los costes de transporte de la mercancía podrían superar las ganancias de la venta, comprometiendo así la rentabilidad.

Sin embargo, el desperdicio de plátanos ha generado un debate en redes sociales sobre la ética de la práctica, dado que implica desechar alimentos para mantener los precios altos. No obstante, algunos de estos plátanos no comercializados se destinan a fines benéficos o para alimentación animal.

Según datos de Asprocan (Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias), el año pasado se registró la mayor producción de plátanos, con más de 26,4 millones de kilos de fruta picada. El medio local Canarias Ahora informa que durante la semana del 12 al 18 de agosto se preveía retirar alrededor del 25% de la producción de plátanos, es decir, unos dos millones de kilos del total producido. En contraste, solo se enviaron 5,5 millones de kilos para su comercialización. De esta retirada, 800.000 kilos correspondían a la pica "obligatoria" y 400.000 a la "voluntaria", decidida por los propios agricultores.

El pasado viernes Asprocan publicó un comunicado defendiendo las protestas de los consumidores en redes sociales por el alto precio de los plátanos. La nota aclaró que la asociación solo "aplica medidas de gestión de crisis para evitar el endeudamiento de los productores" y que estos "se limitan a seguir las directrices de gestión de crisis aprobadas por la Unión Europea en circunstancias como las actuales para estabilizar las explotaciones y prevenir su endeudamiento". La asociación aseguró que no tienen capacidad para influir en el precio de venta al público.

En este contexto, también han solicitado a los operadores de distribución que actúen con urgencia para reducir los precios al consumidor y acercarlos a los precios de origen, en línea con la situación de la oferta. Además, han recordado que el Plátano de Canarias enfrenta desde hace años una competencia desleal con la banana, un producto similar que se beneficia de ventajas normativas que le permiten eludir ciertas exigencias que sí deben cumplir los productos agrícolas nacionales. "Cumplir con estos requisitos adicionales incrementa los costos asociados al manejo y explotación de las plataneras, lo que disminuye progresivamente el margen para los productores, quienes, aseguran, no tienen capacidad para influir en el precio final", dicen.

Apoyo de la Unión Europea

Actualmente, los productores de plátanos de Canarias reciben apoyo de la Unión Europea a través del programa POSEI, que les otorga una compensación de 0,30 euros por cada kilo de plátano no comercializado, siempre y cuando hayan vendido al menos el 70% de su producción asignada.

En un comunicado difundido en julio, la asociación Asprocan solicitó una actualización de las ayudas, argumentando que las actuales no han cambiado desde 2007. Además, pidieron una defensa más robusta frente a la competencia externa y criticaron las recientes decisiones, calificándolas de "contraproducentes". Estas medidas, aprobadas por la Comisión de Agricultura del Parlamento de Canarias en una Proposición No de Ley, buscan reducir los límites de producción y desincentivar el mantenimiento de explotaciones con el fin de "garantizar el futuro de las pequeñas explotaciones".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias