El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la vicepresidenta y diez ministros acudieron este jueves a la toma de posesión como presidenta del Consejo de Estado de la ex vicepresidenta del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, que hizo un discurso nítido con su firme compromiso por la igualdad entre hombres y mujeres.

De la Vega, que eligió como acompañantes a su toma de posesión al ex ministro Fernando Ledesma y a la maestra del feminismo, la filósofa Amelia Valcárcel, reivindicó en su intervención la participación paritaria en todos los órganos de decisión y de poder porque, según dijo, la paridad “no sólo es una cuestión de calidad democrática, también lo es de Justicia”, dijo.

La ex vicepresidenta abogó por tomar medidas para conseguirla y hasta abogó por frenar con las leyes las “jerarquías sexuales” para no desaprovechar “el talento de más de la mitad de la población”, afirmó.

También abordó De La Vega el creciente auge de los populismo, y defendió la necesidad de instituciones serias que mejoren la convivencia y que frenen lo que consideró es la gran palanca de los populistas, alimentar “las pasiones negativas”.
La presidenta del Consejo de Estado también puso en valor el legado que le han dejado sus antecesores, y se comprometió a seguir actuando “con lealtad, independencia y recto criterio”, y mostró su agradecimiento al presidente del Gobierno por haber sido designada para este cargo.

Por su parte, Pedro Sánchez destacó que De la Vega, que fue la primera mujer vicepresidenta del Gobierno y que ejerció como presidenta en funciones, se convierte ahora también en la primera mujer al frente del Consejo de Estado, poniendo en valor su compromiso con la igualdad de género.

También destacó el presidente del Gobierno su “profunda humanidad” y recordó que, desde que dejó el Gobierno, ha dedicado sus esfuerzos a la Fundación Mujeres por África.

Sánchez aseguró que consultará mucho al Consejo de Estado y aseguró que tendrá muy en cuenta sus informes, pese a que no tengan carácter vinculante.