BARCELONA.- El Alto Tribunal estudia si Forcadell vulneró la ley cuando permitió que el Parlament de Catalunya aprobara las conclusiones del proceso constituyente. Los magistrados tendrá en cuenta en qué momento se toma la decisión para no entorpecer la vida política catalana y española y evitar que coincida con una campaña electoral.

El TC no quiere ser utilizado como instrumento político ya que sabe que cada paso que da se analiza con microscopio. Quieren darse el tiempo necesario y actuar con la máxima prudencia. Por ello, el Constitucional evitará precipitarse al tomar una decisión en relación al caso que afecta a la presidenta del Parlament catalán.

Tal como informan fuentes jurídicas, los magistrados quieren centrarse primero en resolver los recursos contra la reforma de ley del TC. Estos requerimientos ponen en duda las atribuciones que puede tener el Alto Tribunal como, por ejemplo, la de poder suspender las funciones de cualquier cargo público.

Este es un primer paso que todavía puede tardar unas semanas en resolverse y no será hasta después cuando se hable del caso Carme Forcadell. 

Fuentes del Tribunal Constitucional apuntan también que los magistrados podrían optar por trasladar el caso a la Fiscalía y dejar de este modo la resolución del conflicto en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

Todo ello para evitar ensanchar el descrédito del Tribunal desde la sentencia del Estatut. El objetivo será intentar que los magistrados tomen la decisión por unanimidad.

El otro elemento que tiene en cuenta el TC es que cuando oficialice la decisión intentará hacerlo teniendo en cuenta el contexto político del momento. Su propósito es evitar incidir sobre alguna decisión trascendente inmediata, como unas terceras elecciones.

Los políticos también tienen que cumplir la ley

La líder de Ciudadanos en Catalunya, Inés Arrimadas, ha asegurado este martes que su formación utilizará "todos" los instrumentos políticos y jurídicos a su "alcance" para frenar un eventual referéndum, y ha afirmado que no respetará que se declarare la independencia.

En declaraciones a Catalunya Ràdio, Arrimadas ha señalado que en el caso de convocarse nuevas elecciones el próximo año serán autonómicas y "no constituyentes", ya que una eventual declaración de independencia o la constitución de una república "no se podrán llevar a cabo" aunque figure en los programas electorales de los partidos independentistas, porque "no es legal".


"Respetaremos el resultado de las elecciones catalanas siempre que sea para constituir un nuevo Parlament y un nuevo Govern" que tiene "muchas competencias": Claro que sí", ha argumentado la líder de Ciudadanos. Pero también ha declarado que no respetará dicho resultado en caso de que sea utilizado "para declarar la independencia evidentemente no, porque esto atenta también a los derechos de los ciudadanos de Catalunya que no quieren la independencia".

Respecto a una posible inhabilitación de la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha admitido que la situación en la que se encuentra ésta "no le gusta", pero ha destacado que los políticos tienen que "cumplir" con la ley y con la justicia como cualquier ciudadano.