Pocas organizaciones han pasado por tantos procesos de refundación en tan poco tiempo. Sumar volverá a pasar por una reestructuración orgánica los días 14 y 15 de diciembre, según ha decidido el denominado Grupo de Coordinación durante una reunión celebrada este sábado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, y lo hará unos meses después de la que en marzo se denominó "asamblea fundacional".

Allí, un domingo en la nave de Villaverde, Yolanda Díaz sacó del plano el proyecto que llevaba diseñando desde su irrupción como líder política en el polideportivo de Magariños (en 2023) y puso las bases para lo que pretendía ser el gran edificio de la izquierda.

Sin embargo, el ciclo electoral, las tensiones internas y las decisiones tomadas arrasaron de tal manera los cimientos de esa construcción que los de Díaz se ven ahora obligados a poner unos nuevos. Nada tiene que ver el diseño de Sumar que se planteó en marzo con el cónclave que tendrá lugar este otoño.

Para empezar, la asamblea de Villaverde aspiraba a configurar un espacio unitario de las izquierdas bajo la batuta orgánica de Sumar y la política de una Yolanda Díaz cuyo liderazgo era incuestionable. El debate entonces giraba en torno a un reparto de cuotas en los órganos de dirección de la plataforma entre los partidos y la militancia de Sumar.

Ahora, Movimiento Sumar se refunda como partido para elegir a una nueva dirección y un nuevo liderazgo alejado ya de la aspiración a ser la casa común de las izquierdas. De hecho, esta asamblea es fruto de la dimisión de Yolanda Díaz el pasado 10 de junio, un día después de los malos resultados de Sumar en las elecciones europeas.

El nuevo papel de Sumar y de Yolanda Díaz en la izquierda

Los fracasos del proyecto en los distintos comicios celebrados durante el año (Galicia, Euskadi y las europeas) fueron desgastando a Sumar a la vez que la cúpula dirigida por la vicepresidenta segunda del Gobierno no terminaba de encajar las piezas con los distintos partidos políticos.

Tras la dimisión de Díaz, tanto la dirigente gallega como su plataforma dieron un paso atrás en la organicidad del espacio progresista. Díaz dimitió de sus cargos orgánicos y Movimiento Sumar pasó a ser un actor más en los debates con el resto de organizaciones acerca de la unidad de la izquierda, enterrando su aspiración como "paraguas" de todo el espectro ideológico.

En este contexto, la asamblea que se celebrará el 14 y el 15 de diciembre determinará el papel que tanto Movimiento Sumar como Yolanda Díaz jugarán en el escenario político. Este sábado el Grupo de Coordinación ha acordado preparar el calendario de cara a esa asamblea, que será en Madrid, pero de momento no se ha cerrado ningún detalle más.

Lo que está claro es que habrá una renovación de los principales órganos de dirección, aunque no se sabe de qué manera (por ejemplo, si en ese cónclave se designará a un nuevo coordinador general). Sumar buscará rearmarse tras un convulso ciclo político.