El presidente del Gobierno vino a reconocer, asistiendo con la cabeza, que la división independentista y en todo lo ocurrido en el Parlament de Catalunya este martes algo habrá influido la apuesta por el diálogo y el entendimiento que su Ejecutivo puso en marcha desde que llegó a La Moncloa.

Sánchez fue preguntado fuera de micrófono, y nada más acabar la conferencia de prensa conjunta con el presidente chileno Sebastián Piñera, si creía que la "operación diálogo" había podido tener influencia en que el independentismo haya quedado en minoría en el Parlament, dando a entender que era un hecho evidente. Y, al ser insistido en esta cuestión, afirmó: "Algo bueno habremos hecho".

El presidente del Gobierno lo que no ocultó es que, en su opinión, la situación con Catalunya está mejor que hace un año, aunque no quiso lanzar las campana al vuelo y precisó que hablaba a nivel general, "más allá de hechos puntuales".

Lo que si enfatizó Sánchez es que la posición del Gobierno sigue siendo apostar por el diálogo y la legalidad, y mostró su plena confianza en que poco a poco se abrirán camino en Catalunya.

Para el presidente del Gobierno, "la unilateralidad y la quiebra de la legalidad deben quedar ya en el pasado",  apostando por abrir otras  vías de entendimiento.

Lo cierto es que Sánchez no pudo ocultar que se sentía más que satisfecho porque en Catalunya no se haya roto la legalidad y la estrategia del dialogo y tender la mano esté fructificando. Incluso, alguno le oyeron farfullar:  "Y la oposición sigue pidiendo con todo esto convoque elecciones".