"Lo siento por la oposición pero los españoles hablaron el 23 de julio". Así ha comenzado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, su defensa de la estabilidad de su legislatura. El líder del Ejecutivo ha comparecido ante los medios por primera vez desde que el PSOE, Junts y ERC pactaran desbloquear la ley de amnistía. "Van a ser cuatro años más de Gobierno, le pese a quien le pese", ha añadido. 

Sánchez, que ha ofrecido una rueda de prensa en Chile junto a su presidente, Gabriel Boric, ha reiterado la importancia de la ley de amnistía para favorecer la convivencia y la reconciliación. Al mismo tiempo ha recordado que durante apenas 100 días de Gobierno ya han puesto en marcha muchas medidas como la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), la revalorización de las pensiones, la Ley de Paridad o la más reciente, la Ley de Trata. 

Es decir, Sánchez está ya implantando "toda la agenda progresista" que se comprometió a cumplir. En ese programa que defendió en su investidura, ha señalado, también se incluía la crisis territorial con Catalunya. "La tarea de un Gobierno no es polarizar ni confrontar sino llamar a la reconciliación. Es lo que estamos haciendo con la amnistía, superar unas consecuencias judiciales que la sociedad catalana viene arrastrando", ha afirmado. 

El líder socialista ha lanzado también un mensaje al PP como "responsable" del conflicto con Catalunya. "No se siente interpelado y está ajeno a una crisis que contribuyeron a alimentar y desarrollar", ha afirmado. "Veremos cómo la derecha política española siempre falla a las grandes citas, es una gran cita por la concordia y conciliación entre españoles. No hay objetivo más noble para un Gobierno que contribuir a esa causa", ha añadido Sánchez. 

Sánchez ha apelado nuevamente a la ciudadanía que pueda tener dudas con la amnistía. Y les ha pedido "confianza". "Va a ser fundamental", ha destacado. El presidente del Gobierno lo ejemplifica con el hecho de que "hoy en Catalunya hay inversión y turismo porque hay concordia y conciliación". 

No ha entrado en mayores detalles Sánchez sobre las razones de los cambios en el texto legal, en concreto a los delitos de terrorismo y alta traición. Ni al papel que pueda tener Carles Puigdemont. Pero sí ha argumentado que esas "mejoras" vienen por el dictamen que realizó hace unos días la Comisión de Venecia a petición del PP. "Entró constitucional, acorde al derecho europeo y así va a salir", ha reiterado.