Raquel Martínez: "A Podemos se le respeta. Quien quiera hablar con nosotros tiene que hacerlo sin vetos"

Raquel Martínez, secretaria de Organización de Podemos en Andalucía, lidera una de las dos candidaturas —la otra es la de la portavoz en Sevilla, Susana Hornillo— que compiten en primarias para decidir el rumbo del partido en los próximos años.

Martínez expone que una de sus ideas fundamentales es reforzar el papel del territorio, de Andalucía, tanto dentro del Estado como dentro de Podemos. "Soy andalucista de corazón", afirma.

En esta entrevista con Público expresa que el objetivo político fundamental es sacar a Juan Manuel Moreno Bonilla (PP) de la Junta y, para ello, considera, es necesario reforzar el papel de los círculos y trabajar codo con codo con los colectivos sociales.

Existe un creciente malestar en numerosos ámbitos hoy, en la Andalucía del PP: sanidad, vivienda, educación, universidad, dependencia...: "Cuando llega el momento electoral, la gente tiene que ver quién ha estado defendiendo sus mismas posiciones y ha estado acompañando. Hay que hacer un trabajo a pie. Estar, colaborar, de forma individual [con los colectivos y movimientos sociales]. Es la única manera de generar esa confianza", analiza Martínez.

¿Qué proyecto plantea para Podemos? ¿Dónde le gustaría que Podemos estuviera dentro de cuatro años?

Me gustaría obviamente que al término del mandato de cuatro años pudiéramos estar en el Gobierno en la Junta. Eso sería una aspiración y sería lo deseable. Si no es así, que tengamos una fuerza con la suficiente presencia dentro del Parlamento andaluz como oposición al Gobierno de Moreno Bonilla. Lo principal es intentar desbancarlo, pero si no es así, la siguiente opción sería esa, tener una fuerza lo suficientemente visible de oposición.

Ha hablado muchas veces de la necesidad de reforzar Podemos ¿Qué ideas fundamentales se necesitan aplicar para lograrlo?

Cuando digo reforzar y construir lo digo sobre todo porque en estos años hemos ido de unas elecciones a otras y eso impide que una organización pueda asentarse y trabajar en el territorio. Cuando te metes en el bucle electoral es complicado. Ahora nos tenemos que dedicar en cuerpo y alma a la construcción de partido desde la base.

En los documentos especificamos que se le dé más visibilidad y fuerza a los círculos comarcales, porque Andalucía es muy grande. Sin la fuerza de Andalucía no se ganan unas elecciones generales. Y construir internamente, sin tener en cuenta esa diversidad de las comarcas  tampoco lo podemos hacer. Entonces, crear círculos comarcales fuertes nos va a permitir abarcar muchísima más área política. Cada comarca en Andalucía tiene necesidades distintas y que se luche en conjunto también va a ser importante.

Tenemos también el tema de los círculos sectoriales. Los vamos a recuperar en Podemos Andalucía. Se trata de tener la capacidad de que todas las personas que tienen unos intereses o una especialidad tanto profesional como de activismo puedan aportar a Podemos Andalucía desde esos círculos sectoriales. Va a ser muy importante el papel de los círculos sectoriales para apoyar al trabajo institucional de concejales y diputados.

Cuando hablo de círculos sectoriales me refiero a círculos de Sanidad, de Educación, de Derechos Humanos, a nivel de toda Andalucía. Va a haber gente que va a estar trabajando en eso, enfocados en eso.

Y también tenemos que fortalecernos en los territorios dando soporte para que en los círculos la gente pueda hacer política desde lo más cercano y que en esa labor tengan el apoyo de la organización y que podamos darle las suficientes herramientas para que puedan trabajar en sus municipios.

¿Cómo se le hace oposición a Moreno Bonilla? Seis años después sigue muy arriba y sin rasguños aparentes. ¿Están las izquierdas haciendo bien su labor de oposición?

Pues creo que en la actualidad no. No se está haciendo una buena oposición, más que nada porque en lo que se entiende como izquierda meteríamos al PSOE. Y el PSOE está desaparecido por completo en el Parlamento andaluz. Y es verdad que el resto de fuerzas tenemos una representación pequeña. Entonces ahora mismo Moreno Bonilla se está moviendo con total impunidad y por eso también están tan arriba.

La verdad es que cada vez más la sociedad andaluza se está dando cuenta de lo que significa un gobierno del PP. Muchas veces se pone el foco en Ayuso a nivel nacional, pero Moreno Bonilla, con el perfil más moderado, está metiendo unos recortes y vendiendo lo público de una manera brutal. Creemos que la mejor forma es trabajar con los colectivos y con las plataformas, con la sociedad civil e ir con ese trabajo conjunto plantándole cara a los recortes.

Hay ahora en efecto una conjunción de malestares en Andalucía - sanidad, vivienda, educación dependencia, universidades-, pero no parece que eso se esté rentabilizando por la izquierda. ¿De qué manera se puede conectar con esa gente que siente malestar?

Cuando hablo de la parte orgánica, de construir y trabajar, me refiero a volver a eso. Nos hemos metido tanto en la dinámica electoral interna que nos hemos olvidado, no todo el mundo. Pero queremos fortalecer eso, el vínculo con los movimientos sociales y los colectivos. Podemos tiene que ser herramienta, no para utilizar al movimiento social, sino para que el movimiento social se sirva de Podemos. Y que pongamos todos nuestros recursos a su disposición.

Cuando llega el momento electoral, la gente tiene que ver quién ha estado defendiendo sus mismas posiciones y ha estado acompañando. Hay que hacer un trabajo a pie. Estar, colaborar, de forma individual. Es la única manera de generar esa confianza. El programa cuando tiene credibilidad es porque lo has estado construyendo con esos movimientos sociales.

Podemos está ahora en el grupo parlamentario Por Andalucía, que lo comparte con otras fuerzas de izquierdas, está IU, está Más País/Sumar. ¿Cree que esta confluencia está dando resultados? ¿Qué balance hace?

Por la parte que nos toca no estamos nada contentas y conformes en cómo se inició. Pero yo estoy muy orgullosa del trabajo que están haciendo los tres diputados. Si no se hubiese dado esa confluencia, ahora mismo no tendríamos esa voz en el Parlamento. Hemos intentado por todos los medios reforzar ese trabajo de los diputados.

¿Cree que es conveniente reeditar algún tipo de confluencia similar a esta, compartiendo espacios con otras fuerzas en las próximas autonómicas o Podemos en Andalucía tiene la voluntad de ir en solitario?

Para empezar, ahora mismo, nadie, ni a nivel andaluz ni a nivel estatal, o sea, nadie puede decir lo que va a pasar dentro de seis meses porque hay una desestabilización en su espacio. Podemos estamos en el mismo sitio. Pero lo que está pasando ahora en Sumar... tendrán ellos que ponerse de acuerdo y decidir qué son, dónde van y qué quieren. Hasta dentro de seis meses, nadie puede decir lo que puede pasar. Quién vamos a tener enfrente para sentarnos.

Desde Podemos siempre lo hemos dicho y en nuestros documentos está. Podemos siempre ha facilitado la escucha para sentarnos a hablar con otras fuerzas, pero también es verdad que tenemos muy claro, y después de lo que pasó, ya votamos en documentos unas líneas muy claras, que fue nuestra militancia la que nos las dio. En Andalucía tenemos muy claro que si el formato es el de Sumar, con los vetos de Sumar, con la línea política de Sumar y con lo que ha representado, no van a contar con nosotros.

¿Habla de Sumar, no de IU?

Hablo del espacio. Si el formato que IU pretende es el mismo que el de Sumar, no nos van a tener en esas. Ya se ha visto que ese formato no funciona y ya se ha visto lo que ha ocasionado. Y está muy clara la línea política que están siguiendo en el Gobierno de España y están muy claros también los vetos y todo lo que hicieron. A Podemos se le respeta. Y quien quiera hablar con Podemos tiene que hablar de tú a tú y sin ningún tipo de vetos y con una línea política que se acerque a la nuestra. Hemos demostrado en el Congreso que tenemos una línea política muy clara. Nos echaron. No nos dejaban hacer política.

Ha dicho que usted no tiene interés en ser candidata en las autonómicas. ¿Cree que es el mejor modelo para una organización política, que la dirección coordine desde fuera de las instituciones?

Sí. Para mí eso es algo de convencimiento absoluto. Lo he demostrado, además, no son palabras al viento. Como secretaria de Organización andaluza podría llevar dos legislaturas en el Ayuntamiento de Almería. Dije que no, primero, porque era candidata al Congreso y no me parece bien que una se presente a todo. Y en la segunda legislatura también rehusé porque siendo secretaria de Organización andaluza mi deber era velar por el interés de Andalucía. No creo que sea ético que una negocie para su propio interés. Creo que una secretaria general tiene que velar por el bien de todo el partido. Así también se huye de individualismos y de liderazgos personificables. Creo que es la manera más sana de construir en colectivo.

¿Cómo analiza la situación política actual, el contexto general  ¿Cree que se enfocan ahora mismo los problemas de verdad de la gente o el ruido, el miedo, la incertidumbre tapa lo que pasa?

Para nada se está hablando de lo que de verdad le interesa la gente. Lo están tapando con ruido, pero además ruido del malo. El ruido que utilizan entre uno y otro es el y tú más en la gresca esta. Y lo que están haciendo en el PSOE, que es bastante sangrante, es alimentar a la extrema derecha.

A nosotros nos acusaban de que hacíamos ruido. Podemos hacía ruido para reivindicar las necesidades de la gente, cuando pedíamos que se pusiera un tope a la vivienda, que se subieran los salarios. O sea hemos estado poniendo voz a las necesidades de la gente y ya sabemos todos lo ataques que hemos sufrido y lo que han intentado hacer con nosotros.

Ahora mismo no se está hablando para nada de lo que de verdad le interesa a la gente. O sea, cuando yo hablo en mi día a día con mis amigas, mi familia, mis vecinas, no hablan de lo que están hablando en el Congreso. A la gente le preocupa ir a fin de mes, pagar la casa, le preocupa ir al médico, que los hijos puedan tener una educación de calidad, sea cual sea la nómina de sus padres. No la están hablando ahora mismo los políticos de esas cosas y es una realidad.

Diga tres problemas, tome tres como referencia, no hace falta que sean tres, los problemas que detecta que son los fundamentales, los centrales de Andalucía y sus posibles soluciones.

En primer lugar, los servicios públicos, desde luego. Hay que dejar a la empresa privada y hay que hacer una inversión real en los servicios públicos en general, en sanidad, educación, dependencia. Son pilares fundamentales para la seguridad y el bienestar de la ciudadanía, entonces eso sería lo primero. Dejar los conciertos y los contratos y centrarnos en la sanidad pública.

El problema de la vivienda, desde luego. Mejorar la ley de vivienda. Andalucía no puede convertirse en un parque temático turístico del que la gente se tiene que ir. Es un problema fundamental. Y hay que hacer vivienda pública. Hay modelos de qué se debe hacer para que se haga vivienda pública y se ponga a disposición de jóvenes, de personas mayores. Sería fundamental.

El modelo económico está muy centrado en el turismo. Y este debe ser sostenible y que de verdad genere riqueza a la propia ciudadanía andaluza, a la gente de Andalucía. Estamos viendo cómo se están favoreciendo, también en la Agricultura, la llegada de fondos buitre a comprar nuestra propia tierra. Los beneficios se van fuera. Eso hay que regularlo y tenemos que crear nuevos métodos de empleo. Es la base para que la ciudadanía andaluza pueda vivir mejor.