El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, no quiso anticipar el posicionamiento de su partido hasta conocer los datos oficiales sobre lo que se denomina el techo de gasto, es decir, los límites de la deuda y los objetivos de déficit; pero dio a entender que por los datos que se están conociendo a través de distintas filtraciones a los medios de comunicación es más que probable que el Grupo Socialista vote en contra en esta ocasión.

Ábalos informó que la decisión definitiva la tomará el PSOE el lunes tras la reunión de la Ejecutiva Federal, pero antes tendrá dos encuentros que determinarán su decisión final en este tema, que puede ser clave hasta para determinar hasta la duración de la legislatura.

El primer encuentro, según informó el dirigente socialista, será este viernes con el ministerio de Hacienda. Ábalos indicó que se les ha convocado a una reunión para informarles de todos los planes y datos que maneja el Ministerio, y que serán aprobado posteriormente en el Consejo de Ministros.

El dirigente socialista indicó que el PSOE acudirá al encuentro pero han pedido celebrarlo con el secretario de Estado de Hacienda, José Enrique Fernández, en lugar de con el ministro del ramo, Cristóbal Montoro, como ha sido lo habitual en todos los casos.

Ábalos explicó que el PSOE no se reunirá con Montoro tras haber sido reprobado por el pleno del Congreso, "es por pura coherencia", dijo, "no vamos a negociar nada con un ministro al que ha reprobado por mayoría toda la Cámara y, además, por iniciativa nuestra".

El PSOE acudirá a ese encuentro, siempre que no se produzca con Montoro, con los responsables de la Ejecutiva de las áreas de Economía y Hacienda, que luego trasladaran los datos a la dirección del partido para empezar a valorarlos.

Paralelamente, Sánchez abrirá una ronda de contactos con los presidentes autonómicos socialistas para intentar armonizar una posición común, lo que se antoja en principio bastante complicado si el PSOE se decide finalmente por su "no" al proyecto del Gobierno, lo que no comparten algunos de sus territorios.

Ábalos quiso restar importancia a esta diferencia de posturas en el partido, y recordó que ya se ha dado en más de una ocasión, donde las comunidades socialistas han tenido una posición diferente a la del Grupo, lo que entendió como algo que puede pasar porque cada territorio tiene sus propios y legítimos intereses. Eso sí, indicó que la posición del Grupo Socialista no dependerá de ellos, y será basada en un planteamiento global y de partido.

Tras estos encuentros y conversaciones, la Ejecutiva Federal del PSOE tomará una posición definitiva el lunes de cara a la votación en el pleno, y todo apunta a que será diferente a la aprobada por la Gestora socialista en la anterior ocasión, que dio su apoyo al Partido Popular. No obstante, fuentes consultadas indicaron que el PSOE está recibiendo muchas presiones para que reconsidere su voto en contra.