Las medidas de empleo en los programas de las seis principales formaciones políticas de ámbito estatal que concurren a las elecciones marcan claramente los postulados de izquierda y derecha de cada partido, con propuestas y modelos del mercado de trabajo completamente diferentes.

En síntesis, PSOE, Unidas Podemos y Más País abogan fundamentalmente por potenciar los derechos de los trabajadores, a través de la negociación colectiva y de incrementar algunos derechos. PP, Ciudadanos y Vox apuestan por afianzar los poderes y las ventajas para las empresas como fórmula para crear más riqueza y que haya más actividad productiva.

Así, los partidos de izquierda abogan por una reforma del Estatuto de los Trabajadores para "adaptarlo a la realidad laboral, tecnológica y ecológica de 2019", dice Unidas Podemos en su programa, y defienden recuperar el poder de la negociación colectiva, para que vuelvan a primar los convenios sectoriales por encima de los convenidos de empresas.

No obstante, hay diferencias entre estas formaciones, Así, Unidas Podemos tiene como gran objetivo las derogaciones de las reformas laborales de Zapatero y Rajoy aunque, sobre todo, la de los conservadores. Defienden la necesidad de un nuevo Estatuto de Trabajadores, pero creen que "el primer paso de este proceso" es acabar con estas dos reformas que, según denuncian, fueron "escritas al dictado de la troika y con el beneplácito de la CEOE".

De hecho, buena parte de sus medidas del apartado laboral se llevarían a cabo directamente con estas derogaciones como eliminar la "flexibilización" en los despidos, reducir la temporalidad, restablecer la negociación colectiva o la ultraactividad de los convenios

Por su parte, el PSOE se mantiene en derogar los "aspectos más lesivos" de la reforma laboral del PP, como la ultraactividad u otros temas que quedaron pendientes en la pasada legislatura. Los socialista no hablan de una nueva reforma laboral, y todo lo circunscriben al nuevo Estatuto e los Trabajadores.

Reducción de jornada

Para Unidas Podemos, otro de los puntos claves es la reducción de la jornada laboral a 34 horas semanales: se trabajarían siete horas de lunes a jueves y seis horas los viernes sin reducción de salario. Apuestan por esta reducción junto con otras medidas enfocadas a favorecer la desconexión del trabajo, flexibilizar los horarios o fomentar el trabajo para paliar las desigualdades laborales entre hombres y mujeres y favorecer la conciliación.

Errejón también se compromete a derogar la forma laboral y apuesta por el Nuevo Estatuto de Trabajadores. En su programa económico ponen el foco sobre la importancia de la reducción de la temporalidad limitando la contratación temporal general a una duración mínima de 30 días y extendiendo la indemnización a 33 días para todos los contratos temporales.

En el caso de Más País también es la reducción laboral una de sus medidas claves, aunque la propuesta es diferente a la de Podemos: una semana laboral de cuatro días con la reducción de la jornada a 32 horas. El partido explica que esta reducción conlleva ventajas medioambientales para "reducir los desplazamientos al trabajo y permitirnos más tiempo para implicarnos en actividades bajas en carbono como las deportivas o culturales" y ventajas de salud física y mental que se ven afectadas por "el trabajo excesivo" y permita la conciliación.

El PSOE pasa de puntillas por este asunto de la reducción de jornada que lo circunscribe en gran parte a un Plan de Empleo Digno que contempla en su programa, así como a medidas de conciliación entre las vida laboral y personal.

Los socialistas lo que sí contemplan en su programa son muchas medidas de actuación en el mercado laboral, como un plan de choque por el empleo joven, un Estatuto del becario que regule su actividad laboral o la creación de la Oficina Nacional de Emprendimiento. El PSOE platea, además, tres tipos de contratos; indefinido, temporal y formativo; mientras que Unidas Podemos pide prohibir los contratos temporales de menos de un mes.

La "mochila austriaca"

Por su parte, PP y Ciudadanos apuestan en sus programas por la flexibilización del mercado laboral en línea con la reforma laboral que está actualmente en vigor. El PP pantea, en este sentido, que "los convenios colectivos se adapten a las necesidades de las empresas y los trabajadores para avanzar en la flexiblidad del mercado laboral":

Ambos partidos, ademas, apuestan por la ​implantación gradual de un fondo de capitalización para los trabajadores o sistema de cuentas individuales de capitalización para la movilidad, al estilo de la conocida como "mochila austriaca".

Para el PP, "el fondo estará mantenido a lo largo de su vida laboral y podrá ser rescatado en favor del trabajador en los supuestos de despido improcedente, de movilidad geográfica, para el desarrollo de actividades de formación o en el momento de su jubilación", dice en su programa.

Ciudadanos va un poco más allá y propone que  "un cambio de trabajo no suponga la pérdida de derechos, es decir, que todos los trabajadores tengan derecho a una indemnización y a la prestación por desempleo, incluso cuando cambien de trabajo voluntariamente",

Ambos partidos plantean un único contrato indefinido, así como penar y perseguir la contratación temporal injustificada, pero no concretan nada más,

Finalmente, Vox plantea un programa abiertamente de derechas que pasa por "respetar la capacidad negociadora de las empresas", bajar la cotizaciones sociales entre cinco y quince puntos porcentuales y también plantean un modelo único de contrato, sin precisar más. También apuesta por diseñar un modelo de indemnización por despido en función del tamaño de la empresa. Y,  como medida peculiar, propone que los sindicatos asuman la totalidad del salario y cotizaciones de los liberados sindicales,

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