La primera ley de protección animal trae novedades para acabar con el maltrato, sacrificio y abandono

El Consejo de Ministros ha aprobado este lunes la nueva Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales que impulsa el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. La norma, a la que ha tenido acceso Público, es pionera en la garantía de estas libertades, ya que establece un marco legal común en todo el Estado. El texto pretende acabar con el maltrato, sacrificio y abandono de los animales.

Sacrificio cero

Una de las principales novedades es que la norma restringe de forma severa los casos en los que se puede contemplar el sacrificio de los animales de compañía. En concreto, las posibilidades se reducen a motivos sanitarios y a la aplicación de la eutanasia para dar a las mascotas una muerte digna. De este modo, queda prohibido sacrificar animales sanos que nadie reclama.

El abandono es otra de las grandes preocupaciones que aborda la ley. El departamento que dirige Ione Belarra ha denunciado que más de 285.000 perros y gatos llegaron a las protectoras en 2021. Las mascotas deberán estar correctamente identificadas y solo los criadores registrados podrán realizar esta práctica. Además, las tiendas tendrán prohibido comercializar con perros, gatos y hurones, así como exhibirlos con fines comerciales.

Hasta tres años de cárcel por maltrato

Para hacer frente al maltrato, aumentará el punitivismo con una reforma del Código Penal. Para los casos en los que el animal acabe asesinado, el texto plantea de dos a tres años de prisión. La norma incluye a todos los animales vertebrados, una novedad frente a la legislación vigente, que deja fuera a muchos de ellos.

Quedan fuera de la protección los espectáculos taurinos

La espectacularización del sufrimiento animal es uno de los ejes para justificar las penosas condiciones de vida a las que estos seres vivos se ven relegados. La ley impulsada por la cartera de Belarra prohibirá los circos con animales salvajes y reconvertirá los zoológicos y delfinarios para que sean centros de conservación de especies autóctonas.

La nueva norma también prohibirá utilizar animales en actividades y espectáculos en los que puedan sufrir daños o incluso la muerte. Esta medida hace referencia a prácticas como el tiro al pichón o las peleas de gallos, "que están ya fuera del sentido común de nuestra sociedad", ha declarado Ione Belarra. Las multas podrán llegar a los 200.000 euros. Sin embargo, quedan excluidas las exhibiciones taurinas o la investigación y experimentación.