El presidente de la Cámara de Comercio de España y presidente de Freixenet, José Luis Bonet, ha afirmado este lunes que introducir 'es posible que una salida [a la cuestión catalana] sea una reforma de la Constitución'. 'Hay posibilidades y una es ésta', ha dicho, para añadir a renglón seguido que 'eso se tiene que consensuar'.

Durante su intervención en el Foro ABC, Bonet ha señalado que 'cada uno hace lo que quiere', y que lo que hace falta es 'respeto por los demás y tolerancia'. Ahora bien, en tanto que ha asegurado no ver una Catalunya independiente en unos años, ha señalado que una alternativa para desbloquear el conflicto catalán pasa por reformas la Constitución.

Hecha esta valoración, Bonet ha asegurado que 'el Estado de las autonomías ha sido un acierto y ha dado vida a España' y ha añadido que al mismo tiempo es preciso mantener la unidad de mercado. 'El mercado cuando más gran mejor y el que no lo entienda se equivoca'.

Sobre la situación concreta de Freixenet y el boicot a sus productos tanto desde dentro como desde fuera de Catalunya. Bonet ha defendido la 'españolidad' de la firma y ha admitido que existe 'temor y preocupación' en el seno de la compañía, porque se trata de una situación 'desagradable'. Sin embargo, el empresario catalán ha asegurado que 'en este momento no está afectando'. 'Al contrario, el año está siendo bueno', ha añadido.

Por otro lado, durante su discurso Bonet ha defendido la unidad de los agentes económicos y de las empresas para mantener la senda de recuperación y, sobre todo, la internacionalización de estas últimas en un contexto de creciente globalización económica. 'Hay que ir todos juntos', ha repetido en numerosas ocasiones durante su intervención. 'La clave es la internacionalización. No es tan fácil pero podemos', ha dicho levantando un cierto murmullo entre los asistentes, ante la similitud de sus palabras y los eslóganes de la formación política liderada por Pablo Iglesias.

Para Bonet, la recientemente constituida Cámara de Comercio de España, en sustitución del Consejo Superior de Cámaras, debe facilitar la salida a otros mercados de las empresas españolas, sobre todo de las pymes. Según ha explicado su refundación tras duros años a raíz de la supresión de la cuota cameral en 2010 ha permitido 'aglutinar a todos los actores importantes de la economía española' y hacer del entramado de las cámaras un 'interlocutor válido con la sociedad y con el Gobierno'. En este sentido, ha reiterado en que 'España ha llegado tarde a la globalización y hay que correr más', pero ha insistido en que 'si corremos juntos correremos más'.