Este artículo se publicó hace 3 años.
Las cloacas de InteriorDe la 'peineta' de Bárcenas a los supuestos donantes del PP: las conexiones aún ocultas de la 'operación Kitchen' (I)
Esta semana comienza la comisión de investigación en el Congreso sobre la 'Operación Kitchen', organizada por la cúpula de Interior de Mariano Rajoy para sustraer pruebas que demostraban la corrupción de los 'populares' desde el año 1982, mientras en la Audiencia Nacional seguirán declarando ex altos cargos históricos del PP. Con audios, vídeos y documentos exclusivos, 'Público' descubre algunas de las claves aún ocultas, como la participación del comisario Carlos Salamanca o de los hermanos Sánchez Lázaro, conocidos por el 'Tamayazo', en el origen del espionaje a Bárcenas.
Madrid-
El lunes 18 de febrero de 2013 los españoles se despertaron con el extesorero del Partido Popular (PP), Luis Bárcenas, saludando al respetable con el gesto de la peineta a su llegada al aeropuerto de Barajas desde Canadá, vía Londres, país adonde había viajado una semana antes.
La explícita imagen con la que aquel lunes bombardearon los medios de comunicación tenía dueño. La había conseguido ese fin de semana anterior la cadena Cuatro, concretamente el programa de la tarde Te vas a enterar, de la mano de la agencia de comunicación propiedad de Álvaro García Pelayo (dueño de Korpa, que después pasaría a llamarse Kometa), conocida por su estrecha relación con el mundo del toreo (representaba, por ejemplo, a Fran Rivera).
La agencia llevaba semanas siguiendo a Bárcenas, desde que estallaran dos bombas informativas en enero: el descubrimiento de una cuenta en el Dresdner Bank de Suiza con 22 millones de euros a nombre del extesorero y la publicación en El País de la contabilidad B del PP, con apuntes que se remontaban al año 1982, cuando el partido todavía se llamaba Alianza Popular (AP).
Ese mismo lunes, acosado por los medios de comunicación, Luis Bárcenas y su mujer, Rosalía Iglesias, pedían ayuda a sus amigos para contratar un chófer de confianza. Este llegó de la mano de la misma empresa de seguridad del Partido Popular, como le contó Sergio Ríos Esgueva —quien acabaría siendo el conductor del extesorero— al juez Manuel García- Castellón en uno de los interrogatorios de la pieza Kitchen de la causa Tándem.
Juez García-Castellón: ¿Cuándo empieza usted a trabajar aproximadamente?
Sergio Ríos: Pues aproximadamente le voy a decir exactamente, a lo mejor suena feo… Yo empecé a trabajar justo el día que vi la famosa foto que este señor, discúlpenme, hace una 'peineta'… Esto era un sábado y yo el lunes me reuní con él.
Juez G-C: Pero año…
Sergio Ríos: Es que… Por eso le digo, señoría, discúlpeme, pero es la foto… No sé si se acuerdan ustedes, la foto esa fue un sábado, el lunes siguiente tuve la entrevista, la primera vez que tenía la entrevista; yo a este señor ya le conocía, no había tenido trato con él, pero, claro, era una persona muy conocida.
Los orígenes del dinero y de la 'Operación Kitchen'
La documentación de la presunta cuenta opaca de Luis Bárcenas en Suiza había llegado a las autoridades españolas en el mes de diciembre de 2012 como respuesta a una comisión rogatoria remitida al país helvético por el Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.
En dicha documentación había indicios de que la cuenta no era sólo del extesorero, aunque estuviera a su nombre, pues como persona física avalista aparecía el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Como empresas colaboradoras en el aval figuraban, entre otras, Serena Digital, del ahora conocido empresario Adrián de la Joya y en la que también participaba el extesorero, y Netcheck, compañía que en su nómina de responsables tenía al sobrino de Manuel Fraga, el exsenador del PP Luis Fraga —íntimo amigo de Luis Bárcenas desde AP por su afición al alpinismo—, Javier Sánchez Lázaro —también exsenador de AP— y Jesús Sepúlveda, entonces, marido de Ana Mato, que fue ministra de Sanidad con el PP, salpicada por el caso Gürtel.
Ese patrón de empresas donantes que entregaban dinero al PP encajaba perfectamente con lo que el primer jefe de Luis Bárcenas en Alianza Popular, el ex secretario general de la formación desde 1979 hasta 1986, Jorge Verstrynge, contaría años después en el programa Preguntas Frecuentes de TV3 y que reproducimos a continuación:
Periodista (Patricia López): En los primeros apuntes de los papeles de Bárcenas, que vienen de los años 80, aparecía un empleado que recibía dinero a través de una empresa. Fui al Registro Mercantil y la nota literal demostraba que en Alianza Popular se habían creado una serie de empresas, en las que también estabas tú, que hacían informes, conjunto de folios, que les daban a los empresarios y les cobraban un pastizal. ¿Nos pueden contar esa práctica del PP y cuál crees que es la variante de ahora, o si con todas las pilladas judiciales al PP, que tú conoces desde sus orígenes, ha cambiado?
Jorge Verstrynge: Hay que distinguir dos fases. La primera es aquella en la cual no existe legislación sobre el tema, de la financiación de los partidos, y luego sí hay la segunda donde hay una legislación. La primera fase, cómo la podríamos calificar, con perdón, maricón el último, todo vale. Las fundaciones alemanas traían dinero a España, las engañabas multiplicando cursos de formación que no existían… Por ejemplo.
P.: Los orígenes del PP, digamos, ¿se financiaron así?
J.V.: De todos los partidos, no había legislación. Era el salvaje oeste: cada uno sacaba el dinero como podía sacarlo. Me acuerdo de una cosa, una vez, faltaba dinero para una campaña en Galicia. Manuel Fraga me indica: "Vaya usted esta tarde a hablar con los de… no me acuerdo si era con Unión Fenosa, que le van a dar un maletín con el dinero que falta. Antes de que fuera, me llaman por teléfono y me dicen: '¿Tienes una secretaria de confianza?'. Sí, se llama Magda...".
P.: ¿Rosalía? [Por Rosalía Iglesias, mujer de Bárcenas, ahora en prisión y que fue secretaria personal de Jorge Vestringe].
J.V.: No, Rosalía ya no estaba conmigo estaba con Bárcenas... "Pues nos la mandas con un maletín".
Efectivamente vuelve Magda con el maletín, yo no lo conté, se lo pasé a Bárcenas para que lo contara él. Al cabo de un rato me llama el hombre: "Nos gustaría un pequeño informe justificativo... como esto es una eléctrica, pues sobre una cuenca eléctrica". Llamo al Departamento de Documentación, no tenían nada. Llamo al señor: "De eso no tenemos nada". Dice: "Ay, qué molestia. ¿Tienes el último número de 'Interviú'? Vete a la página… ¿Ves el artículo ‘La maté porque era mía’, era en Albacete? Pues que tu secretaria copie el texto del artículo y cambie el título y pone Informe sobre la Confederación del Tajo".
Así funcionaba la cosa, cuando yo vi eso dije: "Uy, qué interesante". Si hay gente, allí había un excelente departamento de Documentación, que quiere documentación sobre temas, que no sea sobre las eléctricas, porque de eso no tenían ni idea, por qué no se les va a vender los informes. Y por eso se vendían informes, no era una práctica ilegal. Un gabinete de documentación puede vender informes, sobre todo si formalmente no pertenecía a AP.
El problema viene cuando ya hay legislación. Ahí la cosa se empieza a complicar. Bárcenas, con el que siempre tuve una excelente relación, porque era un chico muy educado, muy trabajador, que me resolvía los problemas económicos... a nivel de partido. Años después ya me fui, vino Aznar y con Aznar el tema de la corrupción dentro del PP empezó a tomar una dimensión industrial. No lo digo como reproche, todos hacen lo mismo.
En el vuelo de Londres a Madrid, Bárcenas le contó al periodista de Cuatro —que le grabó con cámara oculta— que había salido de España para hacer gestiones sobre la sociedad Netcheck Software Solutions, entidad que aparecía también en la cuenta de Suiza con sus dos estrechos amigos, Luis Fraga y Javier Sánchez Lázaro, fundadores junto con él de Alianza Popular y por ende, del PP.
Los tres formaban "el corazón del partido" desde principios de los ochenta, cuando Luis Bárcenas comenzó a trabajar al lado de Verstrynge. Pero ya mantenían vínculos estrechos desde antes, cuando todos ellos eran apasionados jóvenes militantes de la derecha madrileña, al igual que Alberto Ruiz Gallardón o el empresario y marido de María Dolores de Cospedal, Ignacio López del Hierro; vínculos que se remontan incluso al mandato del último alcalde franquista de Madrid, Juan Arespacochaga, quien tuvo de concejal de Medioambiente a otro empresario con estrechas vinculaciones con este grupo de Alianza Popular, el presidente de ACS, Florentino Pérez, aunque en este caso Pérez era concejal por UCD.
Tanto Fraga como Sánchez Lázaro eran las personas que protegían e intermediaban entre el extesorero y la cúpula del PP, en la que estaban situados Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal, cuyo marido aparecía presuntamente en los primeros apuntes de los papeles de Bárcenas como "López Hierro", aunque en estos momentos pertenecía a una facción contraria a los intereses de Bárcenas, según le contó el chófer Sergio Ríos al comisario José Manuel Villarejo, en una conversación mantenida en octubre de 2013.
El dato era importante, como pondría de manifiesto ante el juez García Castellón el también imputado comisario Enrique García Castaño, porque en la Operación Kitchen cada funcionario buscaba a las órdenes de algún político, y sin ánimo de ponerlo en conocimiento de la Justicia, lo que suponían que Bárcenas guardaba: los discos duros con vídeos de seguridad y la documentación contable y bancaria que pudiera haberse llevado Bárcenas de la sede del PP, sus teléfonos móviles con conversaciones tanto de texto como algunos audios, en especial de una comida entre el extesorero y Javier Arenas, entonces diputado del PP andaluz y que había sido secretario general del PP entre 1999 y 2003. Pretendían hallar también la grabación de una reunión con el presidente Mariano Rajoy.
Según Sergio Ríos cuenta a Villarejo en una conversación grabada por el comisario el 2 de octubre de 2013 y que se reproduce a continuación, Luis Bárcenas era muy cuidadoso para evitar que sus conversaciones telefónicas pudieran ser grabadas, utilizando incluso varios inhibidores. Fraga y Sánchez Lázaro fueron dos personas claves durante estos meses, como se desprende de la conversación:
Villarejo: Alguien le tuvo que estar asesorando sobre ese tipo de cosas porque eso denota ser muy profesional.
Sergio Ríos: Yo sé quién fue, Luis Fraga. En todos los inventos y todo esto este hombre era la polla...
V.: Sí, tenía mucho, mucho, mucho, además que yo he hablado con él y el tío "no, ese teléfono no es…" Es como tú, me recuerda a ti y habla ruso, un tío brillante.
V.: Es un espabilaó... Pero ese también es muy amigo, ¿no? Ese y Javier… ¿los dos? ¿Luis más?
S. R.: Es íntimo amigo. La opinión que tiene el jefe [Luis Bárcenas] de Luis [Fraga] es que está loco, también lleva una vida muy desordenada, siempre de viajes, siempre tal, siempre cual, pero...
V.: Tiene una novia rusa... un par de novietas...
S.R.: Siempre está viajando, pero también es su íntimo amigo de escalada, es más amigo incluso que Javier [Sánchez Lázaro], se conocen de muchos años antes y han vivido todas las aventuras de su vida juntos y eso une mucho, estar ahí en la montaña a 8.000 metros y que tu vida dependa del que lleva la cordada...
V.: Con el culo apretao, eso... Perfecto tronco.
De esta conversación se desprende que Villarejo no sólo tenía controlado a Luis Bárcenas, sino también el entorno de sus amigos, ya que conocía la vida íntima del sobrino de Manuel Fraga hasta el extremo de saber que tenía más de una pareja.
Un poco antes, ese mismo día, Sergio Ríos le había manifestado que la "señora", Rosalía Iglesias, y su marido, que llevaba desde junio en prisión preventiva, desconfiaban de quien hasta ese momento había sido el enlace en las negociaciones entre el extesorero y miembros de la dirección del PP en la marcha de Bárcenas del partido, el también socio de Netcheck Javier Sánchez Lázaro, a quien familiarmente el comisario y el chófer denominan "Javier" para no confundirlo con otro Javier, "Arenas", como se oye a continuación:
Villarejo: Eso fue la Fiscalía, fueron los fiscales porque fue Gallardón…
Sergio Ríos: Sí, lo que yo tengo entendido es que ya lo tenía escrito, tardó solamente dos horas…
V.: No, hombre, pero ya estaba pactado, estaba pactado antes… Pero eso es una traición que hace Gallardón, a Aznar le interesaba que entrara para dentro y que montara una bronca que provocara un congreso… Aznar quiere provocar un congreso extraordinario…
S.R.: Pero es que si este suelta lo del cuñado se va a tomar por culo…
V.: Lo del yerno, claro.
S.R.: Si es que está todo el dinero, todo lo de la Fórmula… es que, es que, es que lo ha dicho. Y la boda, todo lo llevó este con el otro, lo que pasa es que estará prescrito pero… la boda la llevó él [Bárcenas] y Arenas.
V.: Ahí el problema es que alguien, yo creo que Pedro J., que tiene ascendencia sobre Aznar, le han convencido a Aznar de que provoque un congreso extraordinario como el que hubo en su día…
S.R.: Sí, el de Valencia, yo estuve en ese.
V.: Y que como consecuencia de ese vuelva otra vez Aznar. ¿Qué ocurre? Que alguien le tiró de la oreja a Aznar y le dijo "tío, aquí nos vamos a callar" y ahora al final se han dado cuenta tanto Aznar como Zaplana…
S.R.: De Zaplana jamás he oído yo hablar…
V.: Lo que me jode es lo de este Javier [Sánchez Lázaro], macho, se ha equivocado el tío este.
S.R.: Se ha equivocado, tenía ahí un puente…
V.: ¿Y por qué se ha equivocado?
S.R.: Primero por intentar… Vamos a ver, la sospecha es del señor [Luis Bárcenas]. El señor ha dicho claramente que él [Javier Sáchez Lázaro] debe tener alguna cosa con Casals [Mauricio Casals, presidente de La Razón y consejero del grupo Atresmedia] o con Arenas por parte de Galeote [Guillermo Galeote, otro de los miembros fundadores de AP y PP e imputado en la trama Gürtel], porque parte de la conversación que le dieron detectó que no era de Rajoy. Y estos le estaban vendiendo la bicicleta de que era de Rajoy, y le ofrecieron la indemnización en B; "que te lo van a embargar, que es una salida". Y les dijo: "pero vamos a ver, que mi familia sabéis que tiene dinero suficiente, como si tienen que vender las casas, que me van a ayudar, que no te preocupes". 300.000 euros yo creo que con las casas de Astorga los cubren de sobra. Dice "no os preocupéis por mí", pero vamos...
Y luego lo del comentario, "tú no crees que Arenas sabía lo de las cuentas pero le engañó, a lo mejor ha sido Arenas el que le ha engañado todo…"; le llaman el Bocanegra. Y fue cuando este dijo: "una polla, si bien tú sabes que lo sabía el otro". Ahí fue raro porque dijo la señora, de hecho, a mí me ha comentado, la reunión fue en el Reebok, en el ABC Serrano hay una cafetería, pero luego hay una abajo de un tío famoso de gourmet y entonces tuvo una conversación en la que le dijo la señora: "Toma mi teléfono, qué crees, que te estoy grabando. ¿Me estás grabando tú a mí, Javier [Sánchez Lázaro]? Porque me estás preguntando cosas que sabes". Se mosqueó la señora y le contestó: "No te pongas así, sabes que mi situación es muy difícil". Y le dijo: "¿te llevo para casa". Y le contestó: "No, me ha dicho mi marido que solamente me suba en el coche con Sergio".
V.: Joder.
S.R.: Y por la noche le mandó un mensaje Don Javier [Sánchez Lázaro] y le dijo: "He hecho lo que me has dicho. Finiquitado todo tipo de trato. Un abrazo". Y me dijo ella: "Fíjate, en lugar de un beso, un abrazo, cuando el papelón nos lo ha puesto a nosotros".
V.: ¿Este es el mensaje que mandó Javier dices?
S.R.: Sí, el domingo por la noche.
V.: Que ha finiquitado todo, ¿en qué sentido?
S.R.: Porque le dijo ella: "Dile adonde vas que no hay ningún tipo de trato, que no hay nada, que ahora Luis no está por la labor de la prensa porque ya os lo hemos demostrado, pero Luis está para la Justicia y que arrieritos somos y cada uno lo suyo. Porque bien tú sabes cómo han sido las cosas, bien lo sabe quien te lo está diciendo y sobretodo lo sabe quien lo tiene que saber".
Los Sánchez Lázaro, el comisario Salamanca y Las Ventas
Pero, ¿quién es Javier Sánchez Lázaro? Es un conocido empresario que, junto a sus dos hermanos, Juan Carlos y Fernando, se han visto más de una vez envueltos en las tramas más oscuras del Partido Popular. Juan Carlos Sánchez Lázaro lleva el Real Madrid de Baloncesto desde que Florentino Pérez descansase su confianza en él en sus primeros mandatos y consiguió mantener el puesto incluso con Ramón Calderón como presidente del Real Madrid.
En ese tiempo —corrían los años 2007 y 2008— su hermano Fernando Sánchez Lázaro tenía un periódico en Madrid, Negocio y Estilo de Vida, junto con el sevillano José María Sayago, quien acabó imputado en el caso de los ERES de Andalucía. Fernando, que había sido diputado de la Asamblea de Madrid, fue noticia junto a Juan Carlos en 2003, cuando se les relacionó con el tamayazo dado en la Asamblea de Madrid y por el que Esperanza Aguirre le arrebató la presidencia de la Comunidad al socialista Rafael Simancas.
En esos años en los que se convirtió en editor de periódico, también estaba vinculado a la plaza de toros de Las Ventas, donde era habitual verle con la pareja de moda del momento, el empresario Ignacio López del Hierro y María Dolores de Cospedal, la nueva consejera de Transportes de la Comunidad de Madrid, que sustituía en la cartera a Francisco Granados.
Fuentes de aquel medio explican a Público que "a la vuelta de esas corridas de toros en sitio preferente a las que invitaba a López del Hierro y a Cospedal, al periódico llegaban temas que luego han aparecido vinculados al PP y a Villarejo. Por ejemplo, el ático de Ignacio González, que estuvimos buscando en Hermanos Bécquer en lugar de en Estepona, porque el único dato que teníamos es que su vecina era Carmen Franco; o los casos de Luis Portillo, Pizarro, Sacyr, Fernando Martín... Incluso nos llegamos a reunir con el hermano de Ramón Calderón para sacarle información sobre Florentino Pérez sabiendo que esa información acabaría en manos del presidente de ACS".
Según han puesto de manifiesto diferentes sumarios como Púnica o Tándem, en ese grupo de amistades estaban, junto a Fernando Sánchez Lázaro y sus hermanos, Francisco Granados, el comisario responsable del aeropuerto de Barajas Carlos Salamanca y el representante de grandes personalidades del mundo taurino Álvaro García Pelayo, el dueño de la agencia que siguió en 2013 a Bárcenas hasta Canadá antes de que la operación Kitchen se hubiera iniciado ilegal, pero oficialmente.
En el registro del comisario José Manuel Villarejo se encontró una nota informativa sin firma, pero fechada en enero de 2012 con información bancaria de Luis Bárcenas y otros miembros del Partido Popular en Suiza. Sin embargo, la contestación de la comisión rogatoria al sumario de Gürtel no llegó hasta finales de ese año y no se hizo público hasta enero de 2013.
En diciembre de 2012, casualmente, el comisario Carlos Salamanca, "el tándem" del comisario Villarejo, según el nombre que se le dio a la operación que les mandó a los dos a prisión en noviembre de 2017, socio de Fernando Sánchez Lázaro, ganó la lotería de Navidad del Atlético de Madrid. Se llevó un buen pellizco, según le contó el propio Salmanca al juez de la causa tras su detención:
Fiscal: ¿Recuerda donde invirtió el dinero del segundo premio, el de 2012?
Salamanca: ¿El de los 800.000 euros? Sí, […] en una donación a mi hijo, en gastos generales […] y 500.000 euros como un préstamo a un amigo mío con su correspondiente interés, registrado notarialmente.
Fiscal: A un amigo... ¿una persona física o una persona jurídica?
Salamanca: Jurídica. Él es Fernando Sánchez Lázaro y la empresa, Dehesa Zamorana SL.
Fiscal: ¿Hay algún vínculo entre Dehesa Zamorana SL, usted o sus familiares?
Salamanca: Puede haber uno y es que Dehesa Zamorana y mi mujer participan en una sociedad. [Se trata de Cosmoceutical Health & Beauty SL, como aclara al fiscal más tarde].
Lo cierto es que los negocios no le iban bien a Sánchez Lázaro, porque meses después, en 2013, Juan Carlos y Fernando vieron como Hacienda les embargaba el distinguido Asador Frontón -conocido por ser el lugar donde van a comer los jugadores y la presidencia del Real Madrid habitualmente- cuando el lugar restaba abarrotado de clientes. Finalmente, y a pesar del medio millón de euros que su amigo el comisario Salamanca le había dejado en el mes de diciembre de 2012, el Juzgado de lo Mercantil número 2 declaró su disolución y liquidación tras acumular una deuda de un millón de euros entre la Seguridad Social y Hacienda.
Fuentes del programa de Cuatro 'Te vas a enterar', le han confirmado a Público que la fuente principal para conseguir la conocida peineta de Bárcenas fue "un policía, no es Villarejo, pero sí que fue un policía quien nos avisó para poder hacerle la encerrona".
Que el comisario Carlos Salamanca trabajase en Barajas y tuviese acceso a esa información de entradas y salidas, que su compadre Sánchez Lázaro tuviera intereses con el PP, y con él Ignacio López del Hierro y María Dolores de Cospedal, y que el amigo de Salamanca sea el dueño de la agencia de comunicación que consiguió seguir al extesorero a Canadá, hace preguntarse para algunas acusaciones y defensas con las que Público ha consultado estos datos, por qué Salamanca es el gran desaparecido de la causa Tándem si aparece continuamente en las agendas del comisario Villarejo y en la mayoría de sus negocios.
Del espionaje en la Comunidad de Madrid a Kitchen
De ese ambiente taurino, de la comisaría de Ventas, también procede otro de los funcionarios clave de la Operación Kitchen, el entonces inspector jefe Andrés Gómez Gordo, más conocido como Cospedín, por ser el hombre de María Dolores de Cospedal en Castilla la Mancha, y en la actualidad imputado por su trabajo como director de seguridad de la Ciudad de la Justicia de la Comunidad de Madrid.
Fue precisamente a través de personas relacionadas con la Plaza de Toros de Las Ventas donde le conoció el consejero Alfredo Prada, su primer valedor, que se lo llevó de director de Seguridad de la Ciudad de la Justicia de la Comunidad de Madrid. Cuando saltó el escándalo por el fiasco del Campus de la Justicia, a Cospedín le imputaron en la causa abierta por irregularidades contables en aquel proyecto, pero al día siguiente comenzó en un nuevo trabajo: como director de Seguridad de la Consejería de Interior, con Francisco Granados como consejero. Es entonces cuando Andrés Gómez Gordo conoce al chófer Sergio Ríos, que era conductor del mismísimo Granados. Y aquí se esconden, en el espionaje en la Comunidad de Madrid muchas de las claves de la futura operación Kitchen.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.