El alcalde de Valladolid y portavoz de la Ejecutiva socialista, Óscar Puente, ha declarado este sábado que el 39 Congreso certificará el final de la "etapa de las baronías" en el PSOE, que considera un "paréntesis" en la historia del partido que "se cierra este fin de semana".

Estas declaraciones se han producido coincidiendo con la llegada de los primeros dirigente socialistas al 39 Congreso del PSOE, que se celebra este sábado y domingo en Madrid, y en el que se darán cita 1.035 delegados, en representación de todas las federaciones del partido, más Europa y América. Este cónclave servirá de aclamación al líder del partido elegido en las primarias de mayo, Pedro Sánchez, y tendrá lugar con la oposición interna -el sector más afín a Susana Díaz- agazapada.

En este contexto, Puente ha reivindicado el modelo federal del partido, con una dirección federal que marque la estrategia y directrices políticas, frente a los poderes de los líderes territoriales.

"La etapa, por desgracia en los últimos tiempos, de los barones ha sido un paréntesis en el partido que se cierra este fin de semana", ha señalado, reiterando que el PSOE es un partido federal y al frente debe estar una dirección federal que "marque la estrategia y directrices políticas", con aportaciones de los territorios, ha dicho, "pero no a la inversa".

Descarta la integración

Puente ha repetido la idea de que la Ejecutiva no responderá a un afán integrador sino al proyecto político del nuevo secretario general. "No será una Ejecutiva de integración, la Ejecutiva será homogénea y en torno a una idea", ha afirmado.

"Además, la integración que se tiene en la cabeza es la del reparto de cuotas en función de territorios y de candidaturas", ha apuntado, desestimando esta fórmula por falta de eficacia. En este sentido, ha asegurado que el objetivo de Sánchez no es blindar la dirección del partido sino confeccionar una Ejecutiva que funcione y gestione bien el proyecto socialista.

Preguntado por la presencia de 'susanistas' en la nueva dirección, el regidor de Valladolid ha señalado que "alguno habrá", si bien ha descartado la presencia de la presidenta andaluza debido a la intención de Sánchez de que ningún dirigente regional forme parte de la Ejecutiva. Y ante el posible descontento del bando perdedor en las primarias, Puente ha reivindicado la "cultura democrática del PSOE" en la que se vota y se acepta el resultado.

Mendía no se siente baronesa

Por su parte, Idoia Mendia, secretaria general de los socialistas vascos, ha dicho preguntada por este asunto que ella nunca se ha sentido baronesa, por lo que no se siente aludida por la cuestión.

La dirigente vasca ha esperado que del 39 Congreso salga un partido unido entorno a la dirección y al programa. "No necesitamos estar cerca de nadie, sólo necesitamos ser nosotros mismos y hablar con una sola voz", ha dicho sobre si su partido va a mirar más a partir de ahora hacia Podemos.

Con respecto a la nueva dirección socialista, ha señalado que Pedro Sánchez ha tenido "la voluntad de integrar" y que todos los demás tienen también "el compromiso de integrar". "Espero que de aquí en adelante estemos todos unidos entorno a la dirección y sobre todo poniendo encima de la mesa las preocupaciones de los españoles, que es para lo que estamos", ha agregado.

Por su parte, la diputada madrileña Zaida Cantera ha defendido que la Ejecutiva que está organizando Sánchez sigue un criterio de meritocracia y será "plural e intergeneracional".

"Cumple lo que dijo", ha afirmado la exmilitar sobre las promesas de Sánchez con respecto a la nueva dirección socialista.

Derogar la ley mordaza, y el 315.3 del Código Penal

ambién ha hecho unas breves declaraciones el que será responsable de Empleo en la nueva Ejecutiva de Pedro Sánchez. Toni Ferrer, ex número dos de la UGT de Cándido Méndez, se ha mostrado agradecido por el cargo y por dedicarse al que a su juicio es el primer problema del país, el paro y la baja calidad de los contratos.

Ferrer ha dicho también que entre las "cuestiones clave" que se deben aprobar en este Congreso figura la determinación de derogar la reforma laboral, la reforma de las pensiones y el artículo 315.3 del Código Penal que "criminaliza el derecho de huelga", ha dicho, y por el que van a ser juzgados dos sindicalistas de la UGT el próximo día 21 de junio en Madrid por participar en un piquete informativo en la huelga general de marzo de 2012.