El nuevo Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas (FFAA) que entra en vigor este jueves trae una buena noticia para los militares que se encuentran actualmente arrestados: contempla una reducción del tiempo máximo de esta privación de libertad y permite a aquellos con sanciones en marcha acogerse a él si las nuevas condiciones les son más favorables.

Es el caso del teniente del Ejército de Tierra Luis Gonzalo Segura, autor del Un paso al frente (Tropo Editores), donde denuncia casos de corrupción en el Ejército. Segura acumula ya cinco meses de arrestos administrativos en menos de un año por la publicación de su libro y su colaboración con medios de comunicación.

Segura fue arrestado el pasado 15 de enero por 60 días por la falta grave de "atentar contra la disciplina de las FFAA". La nueva norma admite como máximo 30 días de arresto para este tipo de faltas, por lo que el teniente saldrá del centro disciplinario militar 10 días antes de lo estipulado. Sin embargo, el la autoridad militar ha compensado la rebaja aplicándole un régimen disciplinario de máxima seguridad. 

El oficial y su abogado han denunciado este dispensado por el Ejército, que se ha "saltado el régimen disciplinario militar a la torera" al limitar sus visitas, su acceso a aparatos electrónicos o la comunicación con su abogado: "Me están apretando al máximo para que solicite la baja psicológica y decir que soy una persona inestable, pero yo eso no lo voy a hacer", adelantaba Segura a este medio.  

Maniobras para volver a arrestarlo cuanto antes

La libertad de Segura puede ser efímera. El mismo día de su liberación, el Ejército ha vuelto a incoar un expediente por sus declaraciones en medios de comunicación. 

"Están buscando enmendar la ley. Es ilegal que escalonen los expedientes, los diferentes instructores no pueden tener relación entre ellos"

Dado que el teniente ha estado arrestado 50 días, su letrado se pregunta por qué el Ejército no ha abierto antes las diligencias para instruir esta nueva falta disciplinaria. "Están buscando enmendar la ley", acusa, revelando que el Ejército maniobra para escalonar sus sanciones para volver a arrestarlo. 

"Es una dispersión de poder", continúa el letrado, que explica que este ardid para que su defendido vuelva cuanto antes al centro disciplinario es "ilegal" puesto que "los instructores de las diferentes faltas no pueden tener relación entre ellos". 

Denuncia al jefe del centro disciplinario

El abogado de Segura ha comunicado a este medio que su defendido ha denunciado al oficial al mando del centro disciplinario por "vulneración flagrante de sus derechos básicos".

"No quieren que se hable de Luis y están haciendo todo lo posible para conseguirlo", acusa el letrado, que se pregunta "qué clase de delito ha podido cometer" para que "se le niegue el permiso de salida del centro para acudir al funeral de un familiar".