MADRID.- Mercè Alcocer, periodista de Catalunya Ràdio, hacía su trabajo habitual frente a la Audiencia Nacional el pasado mes de febrero, sin sospechar que ese día histórico también lo sería para ella, al ser sancionada con 601 euros por incumplir la nueva ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley mordaza. En declaraciones a Público cuenta su "sorpresa" por la sanción, pero también su "alegría" por los apoyos que está recibiendo, incluido el de su empresa, la corporación de medios públicos de Catalunya.

Tal y como ocurrieron los hechos, ¿esperaba usted esta sanción?

En absoluto. En el momento en que los Pujol y sus abogados salen de la Audiencia, por mi cabeza no pasó que hubiera ninguna raya roja imaginaria que estuviera prohibido traspasar. Sólo pensaba en que no se me escapara Pujol, o su abogado... Sólo pensaba en obtener declaraciones, así que fui detrás de ellos sin pensar en nada más que en hacer mi trabajo. Eso sí, cuando un policía me advirtió de que no podía acercarme, me retiré diciéndole: "Ya me voy, ya me voy"... Se puede ver todo en el breve vídeo que TV3 (la televisión catalana) ha colgado en su web.

Habla como si le quedara la sensación de que le han sancionado por hacer lo que ha hecho siempre en su trabajo...

Estoy muy sorprendida, y me sabe mal, no voy a negarlo. Mi trabajo es obtener el mayor número de declaraciones posibles para contrastar la información; no podemos quedarnos sólo con una versión... Después vienen los jueces protestando porque nuestras informaciones no se ajustan a la realidad de tantos puntos de vista. Después de intentar preguntar a Pujol y a su abogado, cuando me echaron atrás, intenté acceder al lugar donde el abogado del expresidente catalán estaba haciendo declaraciones a otros medios, y no me lo permitieron. Fue entonces cuando quien parecía llevar el mando de la organización policial ese día en la Audiencia dijo al agente que me impedía el paso: "A ésa, fíchala".

¿Va a recurrir la sanción?

Sí, mi empresa, que ha estado a mi lado en todo momento, va a llegar hasta el final. Está bien que a los periodistas nos organicen en días como el de la declaración de los Pujol en la Audiencia, pero de ahí a que nos restrinjan y prohíban hacer nuestro trabajo... Estamos llegando a unos niveles de prohibición insoportables y eso afecta a nuestro trabajo, pero también al derecho de todos los ciudadanos a informarse.