La TuerkaMaría Eugenia R. Palop: "Feminizar la política es poner la vida en el centro"

Decía Rosa Luxemburgo que las leyes aseguran la culpabilidad de las sardinas y la impunidad de los tiburones. Más de cien años después, la profesora de Filosofía del Derecho María Eugenia Rodríguez Palop sostiene que "la idea de que el derecho sirve como un instrumento de transformación social al servicio de los débiles sigue siendo una idea marginal". La formación que se da en las Facultades de Derecho es una formación de "adhesión a las estructuras de poder", añade.

La última reforma del Código Penal liderada por Alberto Ruiz-Gallardón o la Ley de Seguridad Ciudadana (conocida popularmente como Ley Mordaza) son sólo algunos ejemplos de un derecho que convierte al enemigo en criminal. "El populismo punitivo demuestra la enorme crisis en la que está instalado el sistema, que se defiende de manera histérica", sostiene la jurista en Otra Vuelta de Tuerka.

Ante esta situación Palop defiende, junto a otros miembros de la judicatura, la necesidad de una auditoría externa del sistema judicial y de un gran pacto de Estado en materia de Justicia. "No existen criterios de selección asociados a mérito y capacidad de jueces y magistrados y por ello no están funcionado los mecanismos de control del ejecutivo", señala.

Como jurista de izquierdas, sostiene además la necesidad de que los derechos sociales tengan siempre apellidos: "El derecho a la vivienda ha de ser el derecho a la vivienda social; el derecho a la salud, a la salud comunitaria; el derecho a la educación ha de ser en la diversidad. Es decir, los derechos sociales siempre tienen que ir orientados a empoderar a la ciudadanía".

Rodríguez Palop ha seguido también muy de cerca la experiencia de los Ayuntamientos del cambio y analizado cómo los liderazgos de mujeres como Manuela Carmena, Mónica Oltra o Ada Colau han puesto sobre la mesa otra manera de hacer política. Sostiene que es posible otro tipo de liderazgo, al que llama "liderazgo transformacional" que pone la vida y el elemento relacional en el centro. "Cuando las mujeres llegan al poder sin haber sido masculinizadas cambian la composición de los equipos y la manera de trabajar", concluye.