Mientras la sociedad atravesaba uno de los momentos más críticos de los últimos años, confinada, preocupada por sus seres queridos, con los mayores en residencias sin los medios ni la atención necesaria. Los gobiernos de Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida firmaban contratos con familiares y amigos donde la suma de la cuantía de las comisiones ascienden a los 6.474.127 euros (6.191.127 euros a cargo del Ayuntamiento de Madrid y 283.000 euros de una mordida para Tomás Díaz Ayuso).

Coches de lujo de marca Lamborghini, Porsche, Ferrari, relojes Rolex y yates son algunas de las compras que Luis Medina y Alberto Luceño han hecho con ese dinero que llenó sus bolsillos durante el confinamiento en 2020.

Desde que estalló la pandemia, los contratos con las empresas de los comedores escolares han sido sustituidos por menús de Telepizza, se han despedido a más de 6.000 sanitarios, han crecido los contratos temporales o eventuales en los centros de salud, se han cerrado más de dos decenas de centros de atención primaria o se ha acabado con las escuelas infantiles de tres a seis años. En general, se han recortado más de 145 millones de euros en diversas partidas de Sanidad, Educación, Transportes o servicios sociales.

Para denunciar esta doble moral de los gobiernos madrileños del Partido Popular, Más Madrid ha lanzado una web que ha llamado Comisiómetro, en la que hay algunas ideas de en qué servicios públicos se hubiera podido invertir ese dinero para que llegara a los ciudadanos y no se quedara en la "saca" de unos pocos.

Entre otras posibles alternativas donde destinar esa enorme cantidad de dinero, el partido de Mónica García propone la posibilidad de haber contratado a 20 profesores de la educación pública, 20 enfermeras, haber concedido 1.000 Rentas Mínimas de Inserción, abierto un colegio o una escuela infantil, una biblioteca e incluso una cama de hospital. "La política es la mejor herramienta para hacer que la gente viva mejor", explica García.