Las formaciones progresistas han criticado esta mañana la celebración en el Senado de la VI Cumbre Transatlántica –organizada por la Red Política de Valores–, un evento con una agenda marcada por su ideología reaccionaria y ultracatólica. En un contexto plenamente condicionado por el auge de discursos contra las mujeres y las personas LGTBIQ+, este encuentro representa un cuestionamiento más de sus derechos. Jaime Mayor Oreja, ministro del Interior durante los Gobiernos de José María Aznar, y José Antonio Kast, expresidente de Chile y defensor de la dictadura de Pinochet, han sido los encargados de la apertura del acto.

La primera en salir a protestar ha sido la portavoz de Esquerra Republicana en el Senado, Sara Bailac, quien ha criticado con dureza que el Partido Popular "haya puesto una alfombra roja" a los "discursos de odio" contra los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y las personas LGTBIQ+. "El Senado va a ser hoy, gracias al PP, un altavoz de discursos que atentan contra la propia democracia", ha expresado Bailac durante una rueda de prensa convocada a media mañana.

La senadora ha recordado que tanto ERC como otros grupos progresistas pidieron en la Junta de Portavoces que "la Mesa reconsiderara la decisión de permitir la celebración de esta cumbre", pero que el PP no la admitió a trámite. En un momento de ofensiva reaccionaria, Bailac ha defendido que "los demócratas, progresistas y feministas" han de ser "más exigentes que nunca para no permitir ningún retroceso". La portavoz ha aludido en especial al PSOE y ha criticado la reciente decisión de los socialistas de eliminar la letra Q de las siglas LGTBQ+. Un acrónimo paraguas que se relaciona con las identidades sexuales o de género que van más allá del binarismo.

ERC se ha comprometido a seguir trabajando "para blindar estos derechos que están claramente amenazados" y ha informado de que este martes la Comisión de Igualdad debatirá una moción sobre la celebración de la cumbre. El partido también presentará una moción en la Comisión Mixta de la Unión Europea con el objetivo de frenar todos estos discursos que "estigmatizan y criminalizan a las mujeres".

Aproximadamente una hora después, ha sido Más Madrid quien ha salido a mostrar su rechazo a la cumbre ultra: "Están oficiando políticas contra los derechos de las mujeres, diputados y diputadas africanas están pidiendo la castración química de personas homosexuales... Es una vergüenza, pero estamos aquí para protestar", ha expresado la senadora e histórica activista por los derechos de las personas trans, Carla Antonelli.

"Hemos registrado desde todos los grupos de la izquierda medidas, además de más de miles de firmas a las que [desde el PP] han hecho caso nulo. Es una auténtica vergüenza que en esta casa se estén acogiendo personas y personajes que van en contra de los principios de una democracia de más de 40 años, en contra del matrimonio igualitario y el aborto, todo ello amparado por el Estado de Derecho", ha continuado Antonelli. "Esto también es el PP, por mucho que se disfracen de psuedoprogresistas", ha insistido.

En la misma línea, Manuela Bergerot ha considerado "alarmante" que se dé espacio a este tipo de discursos en las instituciones públicas. "Esta cumbre no representa a Madrid, en Madrid cabe todo el mundo", ha reivindicado. "El derecho al aborto es una conquista de los años 70 a la que los reaccionarios nunca se acostumbraron", pero "el aborto existe y existirá siempre. La diferencia es que ahora no solo las mujeres con recursos pueden viajar a allí donde es legal para interrumpir su embarazo", ha insistido. "Somos un partido que defendemos los derechos LGTBIQ+, con todas las letras", ha dicho para terminar, aludiendo también al cambio introducido por el PSOE en su hoja de ruta.

A lo que Carla Antonelli ha añadido: "Tras más de 40 años de militancia, me avergüenza que el PSOE elimine esas letras (...) Cuanto más nos ataquen, más épica será nuestra resistencia. Si no quieren lentejas, van a tener un plato bien lleno, porque esta senadora es una mujer trans y a vamos a defender nuestros derechos". 

Desde el PSOE, también han mostrado su "total y absoluto rechazo a que el Senado se convierta en la sala de reuniones de una cumbre antiabortista". "Las mujeres estamos en pie defendiendo nuestros derechos reproductivos. No hay cumbre ultra que nos pueda parar", ha declarado la senadora socialista Carmela Silva, en la Comisión General de Comunidades Autónomas.