El auge de las derechas en España, que ha cogido velocidad tras las elecciones andaluzas, ya tiene un impacto claro en las encuestas. El PP de Alberto Núñez Feijóo parece haberse consolidado como primera fuerza demoscópica y ya aventaja de manera clara a un PSOE que está en mínimos de estimación de votos y de proyección de escaños. El estudio de Key Data para Público se realizó con datos recabados durante la campaña electoral andaluza.

Según este barómetro, el PP vive un momento de auge muy claro y continúa creciendo encuesta a encuesta. Los conservadores ya están en una estimación de voto del 28,7% (su segundo mejor pronóstico en esta legislatura), lo que les valdría 121 escaños. 

El crecimiento de los de Feijóo se debería tanto a factores internos (que son atribuibles al PP y, en general, al bloque de las derechas) como a factores externos (sobre todo el desgaste que parece sufrir el Gobierno de coalición). En el primer caso, los conservadores estarían siendo capaces de recoger votos en prácticamente todos los espacios (votantes del PP fugados, votantes de derechas, abstencionistas...), lo que explicaría buena parte de su auge.

Según explica Paz Álvarez, directora técnica de Key Data, "el crecimiento del PP a nivel nacional sigue la pauta de lo que hemos visto en Andalucía la semana pasada. El PP de Feijóo consigue atraer a votantes de muy distintas procedencias".

"La mitad de los votantes de Ciudadanos en las elecciones de 2019 votarían por el Partido Popular si hoy tuvieran que acudir a las urnas", prosigue Álvarez; "a la vez, mantiene una fidelidad de voto cercana al 80%; además, parte de los votantes que se fueron a Vox vuelven al PP, empieza a verse un cierto trasvase interbloques y consigue movilizar a votantes que decidieron abstenerse antes que votar al partido liderado por Pablo Casado", concluye.

La tendencia alcista de los de Feijóo contrasta con un tendencia descendente que el PSOE viene sufriendo desde hace meses pero que se consolida y agrava tras la campaña andaluza. Los de Pedro Sánchez obtienen una estimación de voto del 25% en el estudio de Key Data, lo que les valdría alrededor de 100 escaños.

Se trata de la estimación más baja de los socialistas en la legislatura, y empeoran incluso las proyecciones a la baja que obtuvieron en los primeros meses posteriores a la victoria de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, que revertió las tendencias demoscópicas durante buena parte del pasado año.

Para Álvarez, "la campaña andaluza, junto con el desgaste del Gobierno, la inflación disparada y Mónica Oltra abriendo todas las noticias en las últimas semanas, ha tenido como consecuencia el desapego al Gobierno de Pedro Sánchez y el liderazgo del PP de Feijóo".

El frenazo de Vox (de sus expectativas más que de sus resultados definitivos) en Andalucía también parece una tendencia del resto del Estado. Los de Santiago Abascal moderan su crecimiento en este estudio (lastrados por los votantes que estarían volviendo al PP), pero la ultraderecha sigue creciendo y se consolida de forma muy clara como tercera fuerza política.

Con una estimación del 16,6% (un punto y medio por encima de sus resultados electorales de noviembre de 2019), Vox subiría hasta los 56 escaños, por lo que, unido al crecimiento del PP (y contando también con la debacle de Ciudadanos), el bloque de las derechas se ensancharía de manera importante.

Unidas Podemos continúa con una tendencia a la baja que le hace caer en estimación de voto de forma gradual y de la que no consigue despegarse. En este estudio el espacio confederal obtiene una estimación de voto del 11%, lo que se traduciría en unos 27 escaños. Desde las elecciones de noviembre de 2019, UP pierde casi dos puntos y ocho escaños, a la espera de el lanzamiento y consolidación del proyecto de Yolanda Díaz, que arrancará el próximo 8 de julio en Madrid.

Según los resultados de este barómetro, el espacio de la derecha ha logrado expandirse tanto que la suma de PP y Vox ya estaría por encima de la mayoría absoluta (177 escaños), y un eventual gobierno de Feijóo y Abascal no necesitaría apoyarse en ningún otro grupo ni formación con representación en el Congreso de los Diputados.

El bloque de la investidura, la mayoría parlamentaria que sostiene al Ejecutivo de coalición en la actualidad, estaría alrededor de los 150 escaños, muy lejos del bloque de las derechas. "Habrá que esperar a que se serenen los ánimos tras las elecciones del domingo pasado y ver qué cristaliza y cómo reaccionan las diferentes fuerzas políticas", concluye Paz Álvarez.