Pablo Iglesias pidió "respeto" para el partido y los planteamientos de Íñigo Errejón, pero indicó que Podemos tiene un "camino distinto" y que sus inscritos expresaron en varias ocasiones desde su nacimiento que ellos no llegaron a la política para "apuntalar el bipartidismo" ni para "facilitar el sueño de los poderosos".

El secretario general de Podemos se expresó así durante su intervención inicial ante el Consejo Ciudadano Estatal, el máximo órgano de dirección de la formación morada. El CCE afrontará la campaña del 10-N, marcada por la división de la izquierda, la irrupción de Más País en el panorama estatal, la fuga de la cúpula de Podemos Murcia hacia el partido de Errejón y la petición de Adelante Andalucía de ir a las elecciones con grupo propio. 

Iglesias defendió durante su intervención la posición que ha tomado Podemos ante la investidura de Pedro Sánchez y dijo que el PSOE siempre defendió "lo que sea antes que gobernar con Unidas Podemos".  Según sus palabras, porque los socialistas saben que si ellos entran en un Gobierno "las cosas cambian" y "los recortes se harían por arriba y no por abajo" durante una futura recesión económica.

Por esto mismo recriminó a Errejón que él dijera que debían dar los votos gratis al PSOE: "Nuestros adversarios no son los partidos, y menos los progresistas. Tenemos que respetar que personas que estuvieron con nosotros en el pasado piensen que en 2016 debimos apoyar un gobierno de Sáchez y Ciudadanos, que no deberíamos haber construido Unidas Podemos con IU o que deberíamos hacer presidente gratis a Sánchez como mal menor, pero tenemos que recordar que los inscritos en las consultas y en la Asamblea Ciudadana Estatal señalaron un camino distinto", explicó. 

Iglesias se mantuvo firme en sus planteamientos e insistió en que Podemos nació para "gobernar un nuevo orden basado en la justicia social" y que por esto van a ser "el premio de caza mayor" durante la campaña del 10-N. 

Sobre el fracaso de las negociaciones con Sánchez, afirmó que el único error que cometieron desde Unidas Podemos fue "creer" al presidente en funciones porque la intención del PSOE nunca fue pactar con ellos. "El poder en España no acepta una fuerza popular que defiende a su gente. Tenemos que tener claro que la pieza de caza mayor en estas elecciones somos nosotros, Unidas Podemos y sus votantes”, precisó, y advirtió que en la campaña surgirá “cualquier artimaña que pueda servir” para hacerles daño.

Por eso, explicó que la campaña electoral de Podemos estará centrada en “hablar de los problemas de la gente” y no centrar en una batalla mediática las diferencias con Sánchez u otras fuerzas políticas.