Pablo Iglesias está dispuesto a renunciar a un sitio en el Consejo de Ministros para llegar a un acuerdo con el PSOE. El secretario general de Podemos transmitió este paso atrás a Pedro Sánchez este mismo viernes. Después de hablar con el presidente en funciones, Iglesias anunció esto en un vídeo por Twitter. 

"El PSOE dice que el único escollo para un gobierno de coalición soy yo. He estado reflexionando estos días y no voy a ser la excusa para que el PSOE evite este gobierno de coalición. Mi presencia en el Consejo de Ministros no va a ser el problema siempre y cuando el PSOE asuma que no puede haber más vetos", explicó Iglesias. 

El secretario general de Podemos también transmitió a Sánchez que renuncia a estar en el Gobierno si la representación de su partido en el Ejecutivo es proporcional a los votos. También reclamó que los nombres del partido para formar parte del Ejecutivo los decidirá Podemos. 

Iglesias no explicó si transmitió esto a Sánchez por teléfono o en una reunión presencial. Tampoco la respuesta o reacción del presidente en funciones. Sólo explicó que pidió a Pablo Echenique que traslade al PSOE la "voluntad de negociar ya un gobierno de coalición de izquierdas". Echenique es el secretario de Acción de Gobierno y responsable de la Comisión de pactos tras el 28-A. 

El grupo confederal espera que con este paso se desbloquee la situación política y que el PSOE comience una negociación integral con ellos durante el fin de semana. Sánchez podría así ser investido la próxima semana. Unidas Podemos lleva pidiendo desde las elecciones generales que se acuerde un programa y los equipos de gobierno. 

Los socialistas no han emitido todavía ninguna respuesta ante la renuncia de Iglesias. Sin embargo, si no dan un giro en su discurso, ambas formaciones deberían llegar a un acuerdo 'in extremis' durante estos días. Después de casi tres meses, Sánchez reconoció el jueves que el obstáculo para formar una coalición era la presencia de Iglesias en el Consejo de Ministros.

En un principio, el grupo confederal no aceptó este veto y pidió a Sánchez que negociara sin líneas rojas. "Vetar a Pablo Iglesias es vetar a Unidas Podemos", afirmó Echenique. Sin embargo, el secretario general de Podemos decidió dar este giro y renunciar a liderar un ministerio. Un paso atrás que también dio en 2016. 

Ambas formaciones tendrían que negociar en cuatro días un pacto programático: Unidas Podemos puso como base el pacto presupuestario de 2019, aunque éste está muy lejos de la oferta quizo el PSOE. También los ministerios que liderarían los miembros de Unidas Podemos. Hasta ahora el grupo confederal ha pedido tener competencias en Hacienda, Trabajo, Medio Ambiente y Memoria Histórica.