El destino de los restos de Franco, meses después de que el Gobierno anunciara que sería exhumado del Valle de los Caídos, sigue siendo una incógnita. La familia insiste en que su deseo es que se mantengan en Cuelgamuros y que, en caso de exhumación, prefieren que sea enterrado en La Almudena. El Gobierno ha mostrado su rechazo a esta posibilidad, que situaría los restos del dictador en el mismo centro de Madrid, y ha anunciado que presentará enmiendas para reformar la Ley de Memoria Histórica y evitar esta posibilidad. Por otro lado, la tumba de El Pardo, donde está enterrada Carmen Polo, es propiedad de Patrimonio Nacional y no de los Franco, tal y como desveló Público. 

Ante tanta incógnita, la única certeza es que la Iglesía católica sacaría tajada económica de la presencia del dictador en La Almudena. El motivo es bien sencillo: todos los visitantes de la cripta donan un euro "voluntariamente" para poder entrar. El vicario del lugar, Joaquín Iniesta, señaló recientemente en declaraciones a eldiario.es que, actualmente, la Almudena recibe unos 800 visitantes al día. Es decir, la cripta de la catedral genera 800 euros al día. 

Sin embargo, la inhumación de los restos de Franco en La Almudena provocaría un importante aumento del número de visitantes. Prueba de ello es el aumento de visitantes que está registrando el Valle de los Caídos en los últimos meses. Solo en el mes de octubre, el mausoleo del dictador y de Primo de Rivera recibió un total de 41.866 personas, una cifra que supone un aumento del 42,7% respecto al número que acudió en el mismo periodo de 2017 (29.335). 

La traducción en número de visitantes en posibles ingresos para La Almudena es sencilla. 41.866 visitantes en La Almudena supondrían un ingreso de 41.866 euros para la catedral en su solo mes. Si se mantuviera este ritmo de visitas a la tumba del dictador durante un año, los ingresos ascenderían a 502.392 euros. 

Evidentemente, el auge de visitantes en El Valle de los Caídos no tiene por qué trasladarse en términos idénticos a La Almudena. Sin embargo, también parece iluso pensar que el traslado de los restos de Franco a este emplazamiento no despertará el interés de franquistas, turistas y curiosos que quieran ver el nuevo emplazamiento de los restos del dictador que fue jefe del Estado durante casi 40 años. 

También existe la posibilidad de que La Almudena dejara de cobrar por entrar a la capilla debido al interés suscitado. No obstante, esta posibilidad haría aún más fácil el acceso a la cripta y facilitaría la exaltación del dictador en pleno centro de Madrid. No obstante, a día de hoy la posibilidad de que los restos de Franco terminen finalmente en La Almudena parece más lejos que nunca. Es la opción favorita de la familia, la Iglesia española no ha mostrado oposición, pero el Ejecutivo de Sánchez sí que ha dejado bien claro que no permitirá que se exalte la figura del dictador en pleno centro de Madrid.