El Gobierno ha vetado una prestación por hijo de 1.200 euros al año a familias pobres impidiendo la tramitación de una proposición de ley presentada en junio por Unidos Podemos. La propuesta, en la que colaboraron organizaciones de la sociedad civil como Unicef o Save the Children, planteaba un calendario progresivo a cuatro años para ayudar a 2,4 millones de niños y niñas a salir de la pobreza infantil. Así, en el primer año de su aplicación, la cuantía aumentaría a 600 euros anuales; en el segundo ejercicio, la prestación se ampliaría a todos los niños por debajo del umbral de la pobreza; el tercer curso, subiría el dinero hasta los 900 euros y finalmente se concederían 100 euros mensuales, 1.200 por año.

La diputada Ione Belarra, portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, ha manifestado que "es incomprensible que el Gobierno se niegue a aplicar una medida defendida por organizaciones como Unicef y que ha demostrado su eficacia para reducir la pobreza infantil en países como Irlanda", que, con una crisis económica similar a la española, "mantuvo su prestación por hijo a cargo en 140 euros al mes y consiguió reducir en 32 puntos la pobreza infantil". 

Teniendo en cuenta que uno de cada tres niños y niñas en España se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión, la decisión del Ejecutivo sólo demuestra, según la diputada, "la profunda irresponsabilidad del Partido Popular y su incapacidad para aplicar políticas que mejoren la vida de los niños y niñas de nuestro país". Belarra ha insistido en que "un Gobierno que no protege los derechos de la infancia, es un Gobierno que carece de empatía".

Unidos Podemos denuncia que el PP ha decidido "abusar una vez más de su prerrogativa como Gobierno en contra del criterio de los letrados del Congreso". En este caso, ha puntualizado Belarra, "se ha puesto la excusa presupuestaria para dar la espalda a millones de niños y niñas en nuestro país y no cumplir lo aprobado en el Parlamento.