Las islas de Formentera, en Baleares, así como el Hierro, la Gomera y la Graciosa, en las Islas Canarias, siguen adelante en su avanzadilla de desescalada. El Gobierno ha acordado que este viernes, 15 de mayo, pasen a la fase 2 de la desescalada, debido a su evolución positiva frente a la pandemia de la covid-19 y los análisis de seroprevalencia.

Las cuatro islas comprenden a 45.000 personas. A partir de la publicación este sábado en el Boletín Oficial del Estado, las cuatro islas pasan a la fase 2, cuando hace dos semanas fueron las únicas en alcanzar la fase 1.

En la fase 2 se relajan aún más las restricciones que se había impuesto sobre el comercio, la hostelería y el movimiento de los ciudadanos al inicio del estado de alarma.

Estas cuatro islas podrán tener abiertos todos los establecimientos comerciales sin cita previa, así como celebrar bodas y velatorios con una limitación de 15 personas si es en espacio cerrado y de 25 si es en espacios abiertos, según ha detallado el ministro de Sanidad, Salvador Illa.

Las islas logran la reactivación progresiva de los servicios sociales, la apertura de centros educativos para labores de desinfección y la reapertura de centros científicos y los centros de alto rendimiento deportivo. También se permitirán los prestamos de libros y visitas a museos a un tercio de sus aforos.

El Gobierno ha valorado este viernes las peticiones de siete comunidades autónomas para avanzar en las fases siguientes.

El ministro Illa ha destacado que el desescalado se guía por "dar siempre pasos seguros guiados por la ciencia y con criterios de máxima prudencia".

La Comunidad de Madrid es la única autonomía que continúa en la fase 0 en la integridad de todo su territorio.