Cónclave popular en Génova y justificación de Alberto Núñez Feijóo frente a su partido: "Con la misma intensidad que fallaron las encuestas no hemos alcanzado las expectativas", ha reconocido el presidente del PP, que se ha quedado a 40 escaños de la absoluta (136 escaños) y ni siquiera consigue formar gobierno pactando solo con Vox. Las matemáticas de Feijóo para llegar a La Moncloa parecen casi imposibles en este momento, pero Génova escenifica al menos ganas de intentarlo.

El líder popular ha presidido este lunes la Junta Directiva Nacional del PP, a la que ha asistido la plana mayor del partido, y ha anunciado que esta misma mañana ha contactado con Vox (33) y el PNV (5) para empezar a negociar su investidura como presidente del Gobierno.

Los nacionalistas vascos ponen como línea roja un gobierno en el que esté, de algún modo, la extrema derecha y Vox, por su parte, tampoco quiere ir en bloque con el PNV. "No puede haber un voto patriótico con un partido separatista, es imposible", ha dicho este lunes Ignacio Garriga, secretario general de Vox.

Con todo, Feijóo insiste en que sí es posible. Ha asegurado ante su partido que ya tiene el 'sí' de Unión del Pueblo Navarro (UPN), que aporta un solo diputado, y que con Coalición Canaria "se ha abierto camino al mismo efecto". También habló con Pedro Sánchez durante la noche electoral y se han emplazado a retomar conversaciones tras el recuento del voto CERA. "No seremos rehenes de la voluntad de nadie, tampoco del candidato socialista. Si Sánchez no acepta el diálogo con el PP exploraremos todas las vías", ha asegurado Feijóo.

Según el líder conservador, que creyó hasta el último momento que podría rozar los 160 diputados, se plantean ahora tres posibles escenarios: "que se permita gobernar a quienes hemos conseguido las elecciones", "el bloqueo" o que "quienes han perdido exploren una mayoría alternativa con el apoyo explícito o tácito de los partidos populistas o independentistas".