En política institucional, quien se mueve no sale en la foto. Esto es lo que les ha ocurrido a 212 aspirantes a alcaldes y alcaldesas que lideraron las candidaturas de sus partidos en las municipales de 2019 y que no repetirán en las de este 28 de mayo. Unos 261 si se suman aquellos candidatos de partidos y confluencias que se han disuelto o reestructurado por el camino.

Ello supone que el 74,36% de los candidatos que lucharon por la vara de mando de sus ciudades en 2019 no volverán a intentarlo en los comicios locales de esta primavera, según el análisis de las listas publicadas en los boletines provinciales de las 52 capitales de provincia españolas, a las que se les han sumado las capitales históricas de Santiago de Compostela (Galicia) y Mérida (Badajoz).

Las razones son tan diversas como candidaturas existen: sangrías internas, política de partido o razones puramente personales son algunos de los motivos coyunturales que han alejado a muchos de los candidatos de la política. De telón de fondo, el fin del ciclo 15M sellado hace cuatro años, ha funcionado como catalizador de muchas de estas mutaciones.

Así, los mayores movimientos se han vivido entre las filas de Podemos, Izquierda Unida y otras fuerzas a la izquierda del PSOE, que en su fractura y recomposición han dejado por el camino al 94,05% de sus líderes locales en 2019.

Por contraposición, entre un 100% y un 25% de los cabezas de lista de partidos regionales tradicionales, como el PNV en Euskadi, ERC en Catalunya o el BNG en Galicia, han logrado mantenerse en primera posición.

El ejemplo paradigmático de la continuidad en los liderazgos se da, sin duda, en los dos grandes partidos de la democracia representativa, PSOE y PP: el 57,41% de los cabeza de lista socialistas y el 33,33% de los populares vuelven a liderar los partidos en las municipales de 2023.

PSOE y PP: promesa de continuidad

En la carrera hacia la alcaldía, 31 de los 54 líderes locales del PSOE que compitieron por la alcaldía de las principales ciudades españolas en 2019 consiguen mantenerse en lo más alto de las listas electorales. Así ocurre en Valencia o Barcelona, donde los socialistas han favorecido los gobiernos municipales de Compromís y Barcelona en Comú, o en las extremeñas Cáceres y Badajoz.

En cambio, no repetirá el que fuera alcalde de Sevilla durante dos legislaturas, Juan Espadas. Este 28M, será su sucesor Antonio Muñoz el encargado de competir por el gobierno de la capital andaluza, uno de los bastiones socialistas en el sur.

También diez de los candidatos populares se mantienen al frente del partido. Algunos de ellos, como Francisco de la Torre en Málaga, o Javier Imbroda en Melilla, han estado más de 20 años al frente del partido. A pesar del cariz personalista de ambos liderazgos, sus largos gobiernos han convertido a estas ciudades en feudos populares.

Ambos alcanzaron el poder local en el 2000. Desde entonces, De la Torre se ha mantenido de forma continua al frente del gobierno malagueño, convirtiéndose en uno de los alcaldes más longevos de la democracia española.

Imbroda, en cambio, permaneció en el cargo hasta junio de 2019, cuando las fuerzas de la oposición se unieron para desbancarlo tras la filtración de un vídeo en el que su hijo compraba votos a cambio de puestos de trabajo. Desde entonces, Eduardo de Castro, originalmente de Ciudadanos, ha liderado la corporación local. Sin embargo, el actual presidente de la ciudad autónoma no se presentará de nuevo a los comicios del 28M, como sí hará  Imbroda.

Podemos, IU y otros cócteles

A pesar de la creciente tensión a nivel nacional entre Podemos y Sumar, proyecto en el que se integran IU, Más País y otras fuerzas regionales de izquierdas, las confluencias y candidaturas de unidad en el plano municipal han crecido en número con respecto a hace cuatro años. Las fórmulas son, en todo caso, diversas.

Ello explica la salida de muchos de los líderes locales que compitieron por la alcaldía en 2019. Tan sólo el 5,95% de los candidatos que encabezaban las listas de estos partidos entonces, han permanecido al frente de aquellas coaliciones este año. Es el caso de María Erika Cadenas en Badajoz, Ana Viñals en Bilbao, Eugènia Pascual en Girona y, por supuesto, el de Ada Colau en Barcelona, quien busca revalidar por tercera vez la alcaldía como líder de Barcelona en Comú.

De cara al 28M, las confluencias entre los partidos nacidos del 15M e Izquierda Unida se han multiplicado. De hecho, el 93% de los líderes de estas fuerzas no repiten debido a que las fórmulas electorales con las que se presentaron en 2019 han mutado, dando paso a un puzle de coaliciones que se reconfigura según la idiosincrasia local.

IU y Podemos han alcanzado acuerdos en las principales plazas del país, entre ellas Madrid, Valencia, Sevilla, Málaga o Bilbao. En Sevilla y Málaga, la confluencia entre Podemos e IU ha vuelto a repetirse, pero en esta vez sin la participación de Adelante Andalucía, que presenta candidaturas propias en todas las capitales de provincia salvo Almería, Jaén y Cádiz.

En esta última ciudad, el partido de Teresa Rodríguez sí ha llegado a un acuerdo de coalición, bajo el nombre de Adelante Izquierda Gaditana, con el resto de fuerzas de izquierdas salvo Podemos.

A la vez, en el caso de las dos principales ciudades andaluzas, es destacable que al nuevo pacto entre Podemos e IU se ha sumado también Más País, a diferencia, por ejemplo, de lo que sucede en Madrid. En Valencia, por su parte, Compromís también ha presentado candidatura propia, mientras que en Zaragoza, Podemos se presenta en solitario al tiempo que IU, nuevamente, se integra en la candidatura municipalista Zaragoza en Común.

Ciudadanos, el paciente enfermo de España

La que fuera tercera fuerza política a nivel nacional se ha desinflado estrepitosamente en los últimos cuatro años. Durante este tiempo, muchos de sus líderes han dejado la política o se han pasado a las filas populares. De hecho, el 76,47% de los políticos que ocupaban las cabezas de listas naranjas en las principales ciudades españolas en 2019 no lo hacen en 2023.

Sobreviven algunos perfiles todavía fuertes, como el de Begoña Villacís en Madrid, que lidera el partido desde 2015 o sus homónimos en Albacete, Ceuta, Santander, Toledo y Valencia.