Público
Público

Elecciones generales 10-N Sánchez cierra la campaña en Barcelona llamando a "romper el muro del bloqueo"

Ante las propuestas de la derecha de ilegalizar a partidos independentistas, el candidato socialista promete prohibir la próxima legislatura a la Fundación Francisco Franco en un acto en el que también han participado Miquel Iceta y Josep Borrell. El ministro de Exteriores en funciones vuelve a comparar Catalunya con los Balcanes.

El presidente del Gobierno en funciones y candidato a la reelección por el PSOE, Pedro Sánchez, junto al líder del PSC, Miquel Iceta (i), durante el mitin final de campaña. /EFE

El desfile triunfal que Pedro Sánchez se había imaginado que sería esta campaña se ha visto enturbiado en su recta final para la sombra cada vez mayor de Vox. Una ligera, pero constante sensación de urgencia, como un molesto tinnitus, recorría esta noche el Pabellón Textil de la Fira de Barcelona, el lugar elegido por los socialistas para su acto de cierre de campaña para las elecciones del domingo. En las puertas del recinto, un grupo de independentistas catalanes ha desplegado una pancarta asegurando que Sánchez no es bienvenido en Catalunya, ante la mirada tensa de los antidisturbios de los Mossos desplegados en la zona.

Sánchez se ha abierto paso entre el público a gritos de "presidente" y ha hecho un discurso encendido, recorrido por una idea central, la de "romper el muro del bloqueo". Tampoco se ha quedado corto a la hora de hacer promesas: ha prometido aprobar los presupuestos generales en los tres primeros meses de gobierno, derogar la reforma laboral, aprobar un nuevo Estatuto de los Trabajadores, reformas de la enseñanza o la sanidad, y más. "Ante aquellos que están proponiendo la ilegalización de partidos democráticos, nosotros tipificaremos los delitos de odio de dictaduras y totalitarismos", ha asegurado, "ilegalizaremos la Fundación Francisco Franco". Además, ha pronosticado que el PSOE será "la primera fuerza política en las generales" y en las próximas elecciones autonómicas.

El candidato socialista se ha hecho acompañar en Catalunya de los cabezas de lista de las cuatro provincias, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, y de dos primeras espadas: el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, Josep Borrell, y el presidente en funciones del Senado, Manuel Cruz, que ha conjurado el fantasma de la abstención y ha animado a la participación este domingo.

"Un gobierno moderado contra los extremistas"

El líder del PSOE ha destacado que se trata de la primera vez que un presidente del gobierno cierra la campaña en Catalunya. "Aquí está la Catalunya que nosotros defendemos", ha exclamado, "la Catalunya que quiere convivencia y no confrontación". También ha visitado los temas recurrentes de esta campaña. En estos comicios, ha sentenciado, "sólo hay dos opciones, o votamos al PSOE para que haya gobierno o votamos a cualquier otra formación política para evitar que haya un gobierno en España", uno que será "progresista ante la ultraderecha" y "moderado contra los extremistas", y que luchará por la justicia social.

Sánchez ha acusado al resto de partidos de tener "un solo proyecto": "frenar al PSOE". Además, ha equiparado nuevamente el independentismo con la ultraderecha, ya que ambas opciones "quieren un gobierno del PSOE débil". "Necesitamos un gobierno fuerte y estable", ha reiterado. "Puedo entender que haya indecisos", ha concedido, "pero si de verdad pensamos en lo que nos jugamos el próximo domingo, la única opción que garantiza gobierno y un avance es el PSOE." Y ha acabado con otra promesa: "La próxima vez que vuelva no será como presidente del gobierno en funciones, sino como presidente del gobierno con todas las funciones, para hacer cosas para esta gran tierra."

Borrell compara a Catalunya con los Balcanes

Borrell ha comenzado su intervención haciendo alusión a su reunión con presidentes de los Balcanes en Ginebra horas antes, "recordando lo que pasó en Yugoslavia: 150.000 muertos". "Cuando pienso que alguien pone como ejemplo Eslovenia o Kosovo, pienso que se han vuelto loca", ha opinado el ministro que, como el resto de oradores, ha hecho un llamamiento a sacudirse la "pereza" de ir a votar el domingo.

En su discurso, polémico como de costumbre y cargado de referencias históricas (Josep Tarradellas, Miquel Roca, Jordi Solé Tura), Borrell se ha reivindicado "catalán, español y europeo". "Y no pienso que me hagan renunciar a ninguna de las tres", ha remachado. El político socialista ha pedido "recuperar el espíritu del 78 y el espíritu del 92 para una Catalunya grande dentro de una España grande". España, ha continuado, "es demasiado pequeña como para despreciar a ninguno de sus hijos y es lo suficientemente grande para que quepamos todos".

Después de un mensaje en vídeo de la presidenta en funciones del Congreso, Meritxell Batet, Miquel Iceta ha reclamado a los indecisos concentrar "el voto en aquellas candidaturas que pueden evitar el bloqueo y derrotar a un gobierno de la derecha" presidido por Pablo Casado, a quien ha descrito como un "rehén de Vox". Iceta ha recriminado al independentismo haber abandonado "el catalanismo constructivo" de Tarradellas. El voto a Sánchez es importante, ha destacado, para que éste pueda "encabezar una victoria progresista que conviene a España y en Catalunya también". "La tenemos a tocar", dijo Iceta. Al término del acto la gente abandonaba el recinto, pero la incógnita del próximo domingo campaba por todas partes.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias