El último pleno de política general del Parlamento vasco en esta legislatura ha tenido un inevitable ritmo de precampaña electoral. Si por la mañana el lehendakari Iñigo Urkullu exhibió una hoja de ruta hacia la profundización del autogobierno, por la tarde ha sido EH Bildu quien ha planteado buscar acuerdos de país para avanzar en esa línea. Urkullu, sin embargo, no se dio por aludido.

"Parece que puede haber bases comunes para emprender un camino como país y aprovechar así el momento histórico", dijo a media tarde Nerea Kortajarena, parlamentaria de EH Bildu. Aludía así a las palabras de Urkullu algunas horas antes, cuando había planteado una hoja de ruta enfocada en el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika, el desarrollo del autogobierno y la convocatoria de una convención constitucional para hablar sobre modelo territorial. 

"Tras los resultados del 23 de julio el debate territorial está y estará sobre la mesa", afirmó Kortajarena, quien señaló que ese debate debe darse primero refrendado por la ciudadanía vasca "para después ser negociado con el Estado español".

La representante de la izquierda soberanista afirmó que "la mano de EH Bildu está tendida para la colaboración y para conseguir un acuerdo histórico amplio". "Señor Urkullu, aquí no hay conspiración. EH Bildu quiere mejorar este país", afirmó.

La respuesta a la coalición abertzale llegó en dos capítulos. Primero fue el portavoz del PNV, Joseba Egibar, quien se preguntó  "cuántas EH Bildus existen". Luego subió al atril el lehendakari, quien se dirigió a la formación que coordina Arnaldo Otegi –presente en la tribuna– en duros términos. "Ustedes usan de maravilla la estrategia y la táctica. Blanquean su imagen", señaló.

Urkullu evitó decir si está dispuesto a alcanzar ese acuerdo de país que había planteado Kortajarena. Durante su turno de respuesta, el máximo responsable político del Gobierno vasco acusó a la formación soberanista de "usar a todos los colectivos como táctica" y de tener una "estrategia dual".

La convención de Urkullu

La propuesta de convención constitucional que planteó hace algunos días el lehendakari ha estado presente en el pleno de este jueves, tanto por la mañana como por la tarde. A la mañana fue el propio Urkullu quien reivindicó esa alternativa para profundizar en el autogobierno dentro de los límites de la Constitución; a la tarde fue Eneko Andueza, portavoz del PSE –formación que gobierna con el PNV en Euskadi–, quien criticó esa idea. 

"Fijar como objetivo una reinterpretación de la Constitución con el trasfondo del derecho de autodeterminación es un objetivo que no podamos compartir", afirmó el representante socialista. "Rechazamos el objetivo de un modelo confederal, que nos tememos que es lo que se propone desde una óptica claramente nacionalista", agregó.

Por su parte, la portavoz de Elkarrekin Podemos, Miren Gorrotxategi, defendió que la Constitución contemple el derecho a decidir. No obstante, advirtió que "el autogobierno ha sido utilizado como un ariete contra las políticas del gobierno central cuando, precisamente, ahondaban en derechos y avances sociales".

ETA, el euskera...

También a la tarde, PP, Vox y Ciudadanos –partido que llegó al Parlamento Vasco gracias a la coalición lograda con el PP en las últimas elecciones autonómicas– tiraron del guion habitual a la hora de mezclar a EH Bildu con la desaparecida ETA o acusar al Gobierno vasco de usar el euskera con fines ideológicos. 

Desde el PP, su portavoz Carlos Iturgaiz recurrió a la propuesta de convención constitucional del lehendakari para desmerecer esa idea y asegurar que se trata de un plan dirigido a "pescar en caladeros de Bildu y dar satisfacción a los delirios de los nacionalistas".