La Inspección de Trabajo pondrá en marcha la próxima semana una campaña dedicada a poner coto al fraude laboral en los contratos fijos discontinuos. La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha anunciado esta iniciativa este miércoles, durante la sesión de control del Congreso al Ejecutivo.

El impulso al contrato fijo discontinuo es uno de los pilares de la reforma laboral aprobada hace unos meses. En concreto, la medida busca que estos contratos cubran los trabajos estacionales de una manera estable y que sustituyan al contrato por obra y servicio determinado, una fórmula que ha disparado la temporalidad.

El objetivo ahora, una vez aplicada la nueva formulación contractual, es atajar el fraude en los contratos fijos discontinuos, un asunto que ha suscitado este miércoles un debate entre Díaz y la diputada del PP Carmen Navarro. 

La parlamentaria conservadora ha denunciado que la reforma laboral "no ha acabado ni con la temporalidad ni con la precariedad, las ha agravado", y ha vaticinado que "en septiembre u octubre cuando los fijos discontinuos se vayan a su casa serán parados".

La vicepresidenta segunda ha recordado que en el último mes, abril, uno de cada dos contratos firmados han sido indefinidos. También le ha recordado que el fijo discontinuo es un tipo de contrato indefinido: "Lo es porque goza de plenitud de derecho, devenga antigüedad, y es exactamente igual que un contrato ordinario en el caso de ser despedido. El fijo discontinuo está pensando para la estacionalidad, que se puede abordar desde contratos estables", ha dicho Díaz.

La titular de Trabajo ha acusado al PP de utilizar a "trabajadores de usar y tirar" en sectores como la agricultura y el turismo durante el mandato de Mariano Rajoy.