Hasta aquí llegó la sexta moción de censura de la democracia reciente. El "esperpento", "circo", "uso espurio de las instituciones", entre otros calificativos cosechados a lo largo del debate, se ha topado con el rechazo de una holgada mayoría absoluta del Congreso de 201 noes. Solo los 52 diputados de Vox y el exdiputado de Cs Pablo Cambronero han apoyado la propuesta de la ultraderecha, con Ramón Tamames al frente, mientras que el PP y los dos parlamentarios tránsfugas de UPN se han abstenido. 

Esta cita parlamentaria, abocada al fracasa incluso antes de nacer, comenzó este martes con la presentación de la moción por parte del líder de la ultraderecha, Santiago Abascal, que cedió su escaño al nonagenario candidato. Desde ahí, Ramón Tamames replicó al presidente del Gobierno y a la vicepresidenta segunda. Pedro Sánchez y Yolanda Díaz confrontaron el modelo del Gobierno de coalición con el bloque de la derecha.

Dentro de este último bloque, Vox ha aprovechado la ocasión para reforzar su papel toda vez que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha estado ausente físicamente, pese a que podía haber acudido por su condición de senador, aunque presente por medio de las intervenciones de otros portavoces, que advirtieron de sus posibles pactos con la ultraderecha tras los comicios autonómicos y municipales del 28 de mayo.

En cuanto al candidato, después de que se filtrara su discurso la semana pasada, el economista e historiador se vio obligado a introducir algunas modificaciones puntuales, evitando así pedir elecciones anticipadas, aunque puso el foco en echar por tierra la Segunda República para pasar por alto la dictadura franquista, a pesar de que fue encarcelado bajo este régimen.

Asimismo, esperó a este miércoles para replicar de forma conjunta a todas las intervenciones. Su esperada respuesta se basó en una reprimenda generalizada, pero también pormenorizada, al Gobierno y a los grupos de la Cámara Baja, a quienes culpabilizó de crear "una situación de amigo y enemigo para acabar con una situación de las dos Españas otra vez, peor que la del 36 incluso".

La segunda moción de Vox ha cosechado un voto más que la anterior, también en esta legislatura contra Sánchez. Es el caso del exdiputado de Cs, integrado ahora en el grupo mixto. "He votado sí a la moción de censura del candidato Tamames. Me ha guiado el respeto que tengo a una persona que cree en otro tipo de política y que fue ingeniero de nuestra democracia. También tengo 1260 razones (iniciativas) para censurar a Sánchez Castejón y querer elecciones", ha expresado Pablo Cambronero en su cuenta de Twitter.

Por otro lado, el PP se ha abstenido y no ha votado en contra, como ocurrió en 2021 bajo el liderazgo de Pablo Casado. En esta ocasión, los conservadores han defendido la necesidad de una alternativa, pero esta no pasa por Tamames. Si bien, han basado su abstención en el "respeto" hacia esta reconocida figura que, como el propio Tamames defendió, aprovechó esta invitación para protagonizar uno de sus "últimos tributos en pro del futuro de este país".