Este artículo se publicó hace 4 años.
Elecciones gallegasCastelao, el intelectual más importante de la historia gallega al que Ortega Smith llamó "racista"
Ortega Smith ha llamado en un mítin en Ourense "racista, antiespañol y xenófobo" a Castelao, uno de los intelectuales más representativos de la política nacionalista y literatura gallega, exiliado tras la derrota republicana en la Guerra Civil.
Pontevedra-Actualizado a
El secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, protagonizó un acto de campaña en Xinzo de Limia (Ourense) en donde no dudó en cargar contra la historia, cultura e idioma del territorio. Esta vez la ultraderecha insultó a Alfonso Daniel Rodríguez Castelao (1886-1950), artista, escritor, político, nacionalista demócrata y republicano, figura que colaboró y lideró la elaboración del proyecto del Estatuto de Autonomía (1936) y que es homenajeada cada año por el Gobierno autonómico.
Y es que un día después de esas declaraciones la Xunta de Galicia otorgaría las Medallas Castelao 2020 a figuras como Pilar Cernuda, Ana Peleteiro o Xosé Manuel Piñeiro, y por ello Smith no vaciló en estirar el desprecio hacia el presidente de la Xunta: "Tanto homenaje todos los años a ese racista, antiespañol y xenófobo de Castelao, se le ha pegado tanto que va a haber que llamarle Alberto Feijóo Castelao". Así lo recoge un vídeo de un vecino que lo grabó desde lejos y en donde se ve como unas jóvenes se llevan las manos a la cabeza y varias personas increpan al secretario de Vox: "¡Burro!", "¡Animal!" y "¡Cazurro!".
Castelao luchó toda su vida por el despertar del pueblo gallego. Representa una de las personalidades más prolíficas de la historia gallega y más estudiadas en las escuelas de la comunidad. Desde su infancia la vida del narrador está ligada a la emigración. Nació en Rianxo (A Coruña) el 30 de enero de 1886 y emigró a Argentina para reunirse con su padre hasta 1900, cuando retornaría a Galicia para cursar sus estudios y el preparatorio de Medicina en Santiago de Compostela. En esa época abordó su afición por la pintura, concretamente orientada a la caricatura, e ilustró y diseñó portadas de libros y también ganó premios con sus óleos, uno de ellos, la Exposición Regional Gallega.
En 1911 editó el periódico El Barbero Municipal y un año después se unió al movimiento agrarista Acción Gallega, aunque continuaría con sus exposiciones pictóricas. En 1916, un año clave en su vida, se incorpora a las Irmandades da Fala e inicia la elaboración de A Nosa Terra participando en asambleas nacionalistas. En 1918 aprueba unas oposiciones al cuerpo técnico del Instituto Geográfico y Estadístico y empieza a escribir para El Sol de Madrid.
En 1922 publicó una novela corta, Un ollo de vidrio. Memorias dun esquelete, y en 1926 su primer libro, Cousas, compuesto de relatos breves. Fue nombrado como diputado en las Cortes Constituyentes de la II República en 1931 y en 1934 publicó una de sus novelas más celebres, Os dous de sempre. Ingresó en la Real Academia Gallega y participó en la redacción del Estatuto de Autonomía que no llegó a ser aprobado por el estallido de la Guerra Civil. La conspiración militar lo sorprende en Madrid el 15 de julio, en donde acudió para hacer entrega del Estatuto gallego a las Cortes. Después del golpe del estado contra la República, Galicia estaba en manos de las armas.
Con la derrota republicana Castelao quiso exiliarse en Buenos Aires por la gran cantidad de población gallega emigrada y trabajó desde lejos por el idioma y la cultura gallega. En 1941 estrenó su famosa pieza teatral Os vellos non deben de namorarse. En 1944 se constituye en Montevideo el Consello da Galiza y se nombró a Castelao como presidente. En 1946 fue nombrado ministro del Gobierno de José Giral. Durante esos años en Argentina publicó Cincuenta hombres por dos pesos (1940) y Sempre en Galiza (1944), obra canon por la que se le considera el "padre" del nacionalismo gallego y en donde se incluyen artículos y ensayos del político.
La obra literaria del escritor esta prácticamente redactada en gallego y así lo defendió en sus textos, mirando desde el otro lado del charco con morriña a su tierra, a la que no regresaría: "Ningún idioma ajeno -por ilustre que sea- podrá expresar en nuestro nombre los íntimos sentimientos, los hondos dolores y las perdurables esperanzas del pueblo gallego: si aún somos diferentes y capaces de existir, no es más que por obra y gracia del idioma".
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.