La Comisión Europea se reúne para preparar las propuestas para el ahorro eléctrico y el impuesto a las energéticas

La Comisión Europea trabajó este sábado en las propuestas que presentará el martes para hacer frente al elevado precio de la electricidad, poniendo el "énfasis" en el ahorro del consumo eléctrico, un impuesto a las energéticas y ayudar a las empresas con dificultades, mientras discutió también un tope al coste del gas.

Así lo anunció la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, en su cuenta oficial de Twitter, después de la reunión que celebraron este viernes en Bruselas los ministros de Energía de la Unión Europea.

"El énfasis de nuestro trabajo antes de la reunión del Colegio de Comisarios en Estrasburgo fue la reducción inteligente (de la demanda), las contribuciones del sector energético para apoyar a los hogares vulnerables y a las empresas y el apoyo a la liquidez de las empresas", dijo Von der Leyen.

La alemana afirmó también que en la reunión de este sábado se centró en "acelerar" la estrategia de Bruselas para reducir la dependencia del gas ruso e incentivar las energías renovables.

En cuanto al posible tope al precio del gas, Von der Leyen dijo que Bruselas "continúa trabajando en respuestas adaptadas al mercado global".

Los ministros de Energía acordaron este viernes reducir el consumo de electricidad y gravar los beneficios de las compañías energéticas y pidieron a la Comisión que diseñe una "intervención temporal de emergencia" en el mercado eléctrico, por ejemplo a través de un límite al precio del gas en la formación de precios de la electricidad.

La vicepresidenta española y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, afirmó este viernes, sin embargo, que la posibilidad de imponer un precio al gas ruso que la Unión Europea importa por gasoducto quedó "abierta", por el rechazo de Hungría y las dudas que genera en países como Alemania.

Ribera aseguró que "hay que seguir trabajando" en la propuesta para definir, además, cómo afectaría a otros productores de gas como Argelia o Noruega.

"El objetivo –dijo hoy Von der Leyen– es lograr bajos precios en Europa garantizando la seguridad de suministro".