Belarra y Garzón trazan la ruta de sus partidos desde el salto electoral de Yolanda Díaz hasta el 28M

Una hoja de ruta para los próximos dos meses que definirá el futuro de la izquierda en los próximos años. Podemos e Izquierda Unida reúnen este sábado a sus máximos órganos de decisión entre asambleas para fijar su posición y estrategias en un camino que comienza al día siguiente, domingo, cuando Yolanda Díaz lance su candidatura a la Presidencia del Gobierno, y que finaliza el 28 de mayo, cuando se celebran las elecciones municipales y autonómicas.

Los dos eventos tiene una fecha concreta, su inicio y su fin en una jornada, pero sus efectos no son abarcables ni en 24 horas ni, posiblemente, en los meses posteriores. El acto de Sumar en el que la vicepresidenta segunda del Gobierno da el salto como candidata a las generales es el principio de un proceso que abarca desde la reconfiguración de la izquierda en todas sus dimensiones hasta la reedición del Gobierno de coalición.

Las municipales y autonómicas son el punto de partida de un ciclo electoral que terminará por decantar el resultado de la pugna entre los bloques de la izquierda y la derecha en España; con los votos de las urnas de mayo se pueden empezar a llenar las urnas de diciembre, y todos los actores políticos son conscientes de esta situación.

Alberto Garzón e Ione Belarra reunirán este sábado, casi a la misma hora, a la Coordinadora Federal de Izquierda Unida y al Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, respectivamente, para abordar estas dos cuestiones. Ambos cónclaves serán los últimos de cada partido antes de los comicios del 28M, se convocarán un día antes del acto que Sumar celebrará en Madrid para avanzar el futuro político y electoral de Yolanda Díaz.

En Podemos son conscientes de que este Consejo no es uno más y de que Belarra y el partido están ante su primera gran disyuntiva tras la marcha del ex secretario general, Pablo Iglesias, hace dos años. La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha afrontado como secretaria general los comicios de Andalucía y de Castilla y León, pero este es el primer gran ciclo electoral de municipales y autonómicas que lidera. En las últimas semanas, las negociaciones entre la formación morada y Sumar para cerrar una coalición han copado gran parte de la atención política y mediática, y Belarra quiere que este Consejo sirva, entre otros fines, para virar todos los focos hacia el 28M.

Virar el foco hacia el 28M

Desde el partido trasladan que no han dejado de lado la preparación de su cita con las urnas, y que han trabajado en las últimas semanas "codo con codo" con Izquierda Unida y el resto de formaciones en las coaliciones autonómicas y municipales que se juegan el futuro de la izquierda. En el discurso que pronunciará ante el Consejo, Belarra buscará poner de relieve la identidad de su partido y su capacidad transformadora para lograr políticas progresistas ambiciosas 'pese al PSOE'.

El Podemos que dobla el brazo al socio mayoritario del Gobierno para aprobar escudos sociales y límites a los precios de las energías es un valor que se quiere aprovechar en el partido de cara a las municipales y autonómicas. Por eso, Belarra hablará de ello ante el CCE este sábado, destacando que, más allá de los logros conseguidos, todavía permanecen abiertos debates centrales como el de la regulación de los alquileres o el del elevado precio de los alimentos, y que la morada es la única fuerza capaz de vencer las resistencias de los socialistas y de otros actores (el mediático y el judicial) para conseguir avances sociales.

Sin embargo, el acto de Sumar será el gran elefante del cónclave, y Belarra lo sabe. A 24 horas de que Díaz anuncie su candidatura, no se espera que la dirección de Podemos acuda al acto en el que se escenificará su decisión. La formación morada pidió cerrar los términos de una coalición electoral para las generales antes para poder garantizar su presencia en este evento, y ha puesto sobre la mesa la necesidad de celebrar unas primarias abiertas para determinar el peso de cada actor político de la futura confluencia y definir las candidaturas electorales.

La vicepresidenta ha rechazado comprometerse con esta cuestión al entender que no se pueden cerrar solo con Podemos las condiciones para la construcción de una confluencia (que incluya primarias abiertas) que apela a varias formaciones, y ha pedido formalmente en varias ocasiones a la propia Belarra que asista al acto aunque no haya acuerdo antes. Junto a Díaz estarán una quincena de partidos, los principales sindicatos, colectivos y los líderes de dos de las grandes familias europeas (los Verdes y el Partido de la Izquierda Europea).

También han anunciado que acudirán los coordinadores de Podemos en Galicia, Borja San Ramón, y en Navarra, Begoña Alfaro. No está claro si asistirán otros líderes autonómicos de la formación morada, y el Consejo Ciudadano de este sábado también servirá como termómetro del cierre de filas sobre la decisión de la dirección de no arropar a Díaz el domingo sin cerrar un pacto antes. 

La fuerza municipalista de IU, un revulsivo para Sumar

En el caso de la Coordinadora Federal de Izquierda Unida, el borrador del informe político sobre el que debatirá el órgano recoge la necesidad de poner todos los recursos del partido al servicio del despegue de Sumar y de Yolanda Díaz como opciones electorales. En concreto, IU defiende que su principal fortaleza, la implantación territorial y su presencia municipalista, son condiciones necesarias para el triunfo del proyecto liderado por la vicepresidenta. 

Los de Garzón entienden que ante un proceso de reconfiguración como el que ha generado Sumar el primer acto reflejo de las organizaciones políticas sea el repliegue defensivo e identitario, pero consideran que el proyecto de Díaz debe ser considerado como una oportunidad y no como una amenaza. Izquierda Unida enviará a una amplia delegación de su dirección al acto y hará un llamamiento a sus cuadros y a su militancia para que también asistan. 

También se dedicará buena parte del debate de este cónclave a las municipales y autonómicas, y el borrador del informe político recoge que "en estos dos meses, la izquierda, y particularmente nuestra organización, se active de manera completa para librar estas batallas políticas fundamentales en las mejores condiciones posibles". "Si cada dirigente, si cada militante se convierte en un activista de una o varias campañas, estamos convencidos de que sacaremos un gran resultado", concluye este documento.

Las conclusiones que Podemos e IU saquen de estas dos reuniones definirán el plan para dos meses del rumbo que la izquierda quiere tomar en los próximos años.