Podemos está en plena ofensiva contra el poder de la banca. Este martes Pablo Iglesias ha defendido en el pleno del Congreso una propuesta de Ley para impulsar un impuesto especial a la banca y este miércoles preguntará al presidente del Gobierno cuáles son sus "planes" sobre Bankia. La intención del principal socio de Pedro Sánchez es arrancar un compromiso que suspenda la privatización de la entidad financiera. Pero, como ha ocurrido con el impuesto a la banca, los socialistas no se muestran a favor de apoyar al grupo confederal en esta reclamación.

Las medidas de Podemos no se presentan en cualquier semana. Llegan a la Cámara Baja a menos de una semana de que comiencen los juicios a Bankia: el próximo lunes 26 de noviembre se sentarán en el banquillo 34 acusados por la presunta estafa de 2012. Y hace tan sólo unas semanas que se puso el foco sobre la banca después de la polémica con el impuesto a las hipotecas.

El argumento del partido morado para defender la nacionalización completa de Bankia es que es un banco que ya ha costado 22 mil millones de euros a los españoles por lo que ya es público y propiedad del Estado ya que posee un 61,3%. Para Podemos el camino a seguir sería suspender su privatización y convertir la entidad en una banca pública que trabaje "en beneficios del país y de las familias" y no en pos "de la especulación financiera y de los fondos buitres".

Esta fue la dirección hacia la que apuntó Pablo Echenique la semana pasada tras la rueda de prensa de la Ejecutiva del partido. De hecho, dio un paso más allá y pidió la dimisión de su presidente, José Ignacio Goirigolzarri. "Si el presidente de Bankia no está de acuerdo con que debe ponerse en favor del pueblo, debería cambiarse de presidente", alegó el secretario de organización y acción de Gobierno de Podemos. Una reclamación que mañana también podría salir en el hemiciclo del Congreso por parte de Iglesias, aunque fuentes de la dirección explican que la intención será poner el foco en el Gobierno y en impedir su privatización.

Previsiblemente, Sánchez no cogerá el guante de Iglesias ya que a principios de noviembre ya rechazó este plan de sus socios. Con esto, sería la segunda vez que el Gobierno se posiciona en contra de una iniciativa de sus principales socios en la misma semana.  

Aún así, desde el grupo confederal presentarán más medidas que vayan en esta dirección. Este lunes, la Ejecutiva del partido decidió trabajar en una ley de banca pública que sea "útil para la transformación de nuestro modelo productivo y además corrija algunos de los problemas observados en el sistema financiero español: excesiva concentración, problemas de gobernanza y tendencia a la generación de burbujas financieras".

Aunque la presión de Podemos se haya intensificado, las iniciativas respecto al poder de la banca no son nuevas para el partido morado. El impuesto a la banca que hoy ha rechazado el Congreso ha sido una constante del partido desde las pasadas elecciones generales. "Desde Podemos creemos que los impuestos a la banca son una necesidad democrática, social y económica. Urge aprobar medidas de solidaridad tributaria", insisten desde la formación morada.