Mariano Rajoy no acudirá al Congreso de los Diputados para explicar el desarrollo de la crisis abierta a raíz de la infección de una auxiliar sanitaria, Teresa Romero, por el virus del ébola tras atender al segundo de los dos misioneros españoles gravemente enfermos repatriados y tratados en el hospital Carlos III de Madrid. La profesional sanitaria se encuentra desde hace varios días en estado grave en el mismo centro sanitario mientras de desarrolla una gran polémica sobre los protocolos de seguridad aplicados y los criterios políticos empleados.

Los grupos parlamentarios socialista y la Izquierda Plural habían solicitado que el presidente del Gobierno acudiese a la Cámara baja para explicar la gestión de esta crisis que ha desatado alarma social y fuertes tensiones en el seno del propio Gobierno y la Comunidad de Madrid sobre la gestión de la crisis sanitaria una vez se conoció la infección que sufría Teresa Romero.

Sin embargo, el grupo parlamentario popular, que cuenta con mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados, se ha opuesto esta mañana a que el presidente del Gobierno comparezca en sede parlamentaria para ofrecer su versión de lo sucedido. La negativa se ha producido en la reunión de la Junta de Portavoces que es la instancia de la institución que ordena la inclusión de los asuntos en las sesiones parlamentarias.

El argumento que ha empleado el portavoz popular, Alfonso Alonso, se ha basado en que había ya muchas peticiones de comparecencias de la ministra de Sanidad, Ana Mato, de otras instancias para dar explicaciones. Y que la propia ministra ya tenía interpelaciones solicitadas por los grupos parlamentarios. En definitiva, que ya había 'mucha información en trámite ante la cámara', ha dicho a Público uno de los asistentes a la reunión de la Junta de Portavoces.

Todos los grupos parlamentarios de la Cámara baja han votado a favor de la comparecencia del presidente del Gobierno pero el 'rodillo' del PP ha primado, por lo que Rajoy no comparecerá en una sesión concreta sobre este polémico asunto que ha concentrado la atención ciudadana en los últimos diez días.

Con todo, el presidente Rajoy deberá responder este miércoles en la habitual sesión de control al Ejecutivo a la pregunta que le ha planteado el líder de la oposición socialista Pedro Sánchez. Ya la semana pasada el dirigente del PSOE cambió sobre la marcha su pregunta para interrogarle sobre el control de la enfermedad tras conocerse la infección de la auxiliar sanitaria Teresa Romero por el virus.

En aquella ocasión Rajoy contestó que se estaban haciendo bien las cosas y que se dejase trabajar a los profesionales. Sin embargo, ante la incapacidad de su ministra de Sanidad, Ana Mato, para afrontar todas las irregularidades en los protocolos sanitarios que iban conociéndose, la falta de coordinación en ámbito político y la ausencia de una información que calmara las inquietudes de los ciudadanos, el propio Rajoy encomendó a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, que se pusiese al frente de una comisión técnica que desde el pasado sábado se ha hecho con las riendas de la crisis y de la información a la sociedad.