Opinión

Espejo de Príncipes, dedicado a Felipe VI

Felipe VI en su mensaje de Navidad, grabado en el Salón de Columnas del Palacio Real.EFE/ Ballesteros

Por Ramón Soriano

Catedrático emérito de Filosofía del Derecho y Política de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla

-Actualizado a

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Primer consejo: Haga saber el rey a la ciudadanía cuál es su función en la estructura del Estado

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El desconocimiento sobre las funciones del rey no procede solo del público en general, sino incluso de los políticos, nuestros representantes

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Segundo consejo: Sea el rey equitativo en los asuntos a tratar

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No puede un rey referirse al problema de las inmigraciones en su país, dejando en el tintero el de la violencia de género

Tercer consejo: Sea el rey circunspecto en las referencias concretas y la exigencia de responsabilidades

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Cuarto consejo: sea el rey neutral y así podrá representar a toda la ciudadanía

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Quinto consejo: Abandone el rey privilegios injustificados en una sociedad moderna de un Estado democrático

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El rey debe abandonar sus atributos, que no corresponden a un Estado de Derecho y responden a privilegios arcaicos e injustificables

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