Steve Bannon, una polémica figura vinculada a la extrema derecha y al populismo en Estados Unidos, ha dejado su cargo en la Casa Blanca, según informan hoy medios estadounidenses que citan fuentes oficiales. Bannon era uno de los elementos más polémicos del círculo interno de ayudantes de Trump por sus ideas ultranacionalistas y antigubernamentales.

Según las informaciones, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habría decidido aceptar la dimisión de Steve Bannon como asesor ideológico, a pesar de que había afirmado a sus asesores que lo despediría en fechas próximas. El presidente y altos funcionarios de la Casa Blanca estaban debatiendo cuándo y cómo despedir a Bannon.

Los medios estadounidenses afirman que Bannon presentó su dimisión el 7 de agosto, para ser anunciada al comienzo de esta semana, pero se retrasó después de la agitación racial en Charlottesville, donde un supremacista blanco arrolló con su coche a una manifestación antirracista y mató a una joven. 

Después los ocurrido, activistas de derechos humanos exigieron que el presidente despidiera a los llamados nacionalistas que trabajan en el ala oeste de la Casa Blanca, entre ellos Bannon. 

Según informa The New York Times, Bannon se habría enfrentado durante meses con otros asesores del ala oeste y con miembros de la familia del presidente. La renuncia de Bannon, que ayudó a impulsar algunas de las promesas de campaña del Trump, hace más fácil que el presidente se enfrente a las críticas.

El martes en la Trump Tower de Nueva York, el presidente de EEUU se negó a garantizar la seguridad laboral de Bannon, pero lo defendió como "no un racista" y "un amigo". Las informaciones apuntan a que se estaba pensando si mantenerlo un tiempo aún en su cargo. 

Varios funcionarios de la Casa Blanca dijeron que Bannon parecía estar provocando a Trump y no entendían cómo podía mantenerlo después de que se publicara una entrevista en The American Prospect donde se recogen declaraciones del asesor en las que se burla de la amenaza militar norteamericana a Corea del Norte y lo califica de disparate.

Según recoge NYT, Trump ha querido eliminar a Bannon desde que expulsó a Reince Priebus como su jefe de gabinete hace tres semanas. Según las informaciones, Bannon se había alineado con Priebus. Pero Trump cambió de opinión cuando varios defensores de Bannon advirtieron al presidente que se arriesgaba a perder partidarios que veían a Bannon como un creador de sus opiniones.

Además, Bannon ha estado también en una batalla con Jared Kushner, yerno del presidente y consejero mayor, desde la primavera. Bannon y Kushner eran aliados pero su alianza se rompió y pasaron a enfrentarse duramente en los últimos meses. Este hecho le sumó un enemigo más en la Casa Blanca.