Alemania, Francia y otros siete socios de la Unión Europea (UE) apuestan por impulsar este jueves en Bucarest, en una reunión informal de ministros del Interior, un mecanismo temporal para distribuir a migrantes rescatados en buques en el Mar Mediterráneo. Esta idea también es respaldada por Portugal, Irlanda, Rumanía, Luxemburgo, Holanda, Italia y Malta.

"Me parece indigno que cada vez que un barco es rescatado tengamos el debate sobre qué países están dispuesto a acoger a estas personas", explicó ante la prensa el secretario de Estado alemán de Interior, Stephan Mayer, en referencia a recientes casos.

Los responsables de Interior de la UE debaten este jueves en la capital rumana cómo responder a la llegada de migrantes por el Mediterráneo, a falta de una solución común por las divergencias sobre la reforma del régimen de asilo. "Para nosotros es importante crear un mecanismo de reparto en el que participen muchos países. Por ahora son nueve, pero eso es insuficiente", agregó el responsable de Interior alemán.

"Francia y Alemania quieren usar el día de hoy para ampliar el círculo de países que participen en este mecanismo", agregó. "Queremos un mecanismo general, sin importar donde sean rescatados, sea ante la costa de Malta, España, Italia o Grecia", especifico Mayer.

Por su parte, el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramópulos, también se mostró favorable a mecanismo "temporal" hasta que la UE cierre definitivamente la reforma del régimen europeo de asilo, bloqueada desde hace dos años por las diferencias internas entre los países miembros.

El político griego pidió "más voluntad política" a los socios europeo para afrontar el desafío de la migración, "que ha llegado para quedarse", y buscar soluciones definitivas. "No podemos seguir con soluciones temporales, necesitamos encontrar una posición común sobre política de asilo", demandó Avramópulos ante la prensa.

Con este mecanismo temporal de distribución se pretenden evitar situaciones como los de los buques de las ONG alemanas Sea Watch y Sea Eye, que estuvieron dos semanas en alta mar con 49 migrantes rescatados a bordo porque Italia se negó a abrir sus puertos.

Finalmente un acuerdo para distribuir a los rescatados entre Alemania, Francia, Portugal, Irlanda, Rumanía, Luxemburgo, Holanda e Italia hizo posible que desembarcaran en Malta.

El ministro de Interior de Malta, Michael Farrugia, se mostró favorable a un mecanismo temporal pero pidió también buscar soluciones definitivas y, especialmente, luchar de forma más efectiva contra las mafias que trafican con personas. "Tenemos que abordar el modelo de negocio de estas mafias en lugar de solo tratar de salvar y distribuir a los migrantes", dijo.
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Según datos de la agencia fronteriza europea Frontex, el número de migrantes llegados a la UE de forma irregular en 2018 fue de 150.000 personas, lo que supone el dato más bajo en los últimos cinco años y representa una caída del 92% respecto al pico de 2015.

No obstante, por segundo año consecutivo el número de llegadas a España se duplicó hasta alcanzar las 57.000 personas, como resultado del sucesivo cierre de otras rutas migratorias, como la de los Balcanes y el Mediterráneo central hacia Italia.